¿Quiénes son mejores, hombres o mujeres?

Todos los días podemos escuchar comentarios como que los hombres no deben llorar porque las mujeres son las sensibles, o que los hombres son más inteligentes que las mujeres. Muchas de estas cosas son clichés, pero hay algunas que si están científicamente comprobadas.

• Los hombres son más sensibles al estrés que las mujeres: Esto es Falso, un estudio de investigadores en Filadelfia dice que el cerebro de las mujeres es más sensible a la acción de una hormona que responde ante el estrés, las neuronas de las mujeres son más propensas a reaccionar y desencadenar el proceso de estrés. Los hombres pueden adaptar sus neuronas para resistir sus efectos

• A las mujeres se les dan mejor las matemáticas: según un estudio de la Universidad de Wisconsin no hay distinción entre hombres y mujeres a la hora del manejo de números

• Los hombres tienen más fantasías sexuales: esto es falso, un estudio de la Universidad de Granada en España demostró que no existen diferencias significativas entre la cantidad de fantasías sexuales que tienen los hombres y las mujeres

• Las mujeres hablan más que los hombres: esto es cierto, un equipo de neurocientíficos de Maryland concluyó que las mujeres hablan más que los hombres

• El cerebro del hombre es un poco más grande que el de la mujer: esto es verdadero, un estudio de la Universidad de Cambridge reveló que el encéfalo del hombre es por término medio entre un 8% y un 13% más grande que el de las mujeres

• Las mujeres son capaces de distinguir más colores: esto es verdadero, la mente femenina es capaz de discernir una gama de colores más amplia ya que perciben mejor los matices cromáticos

• Los hombres tienen mejor memoria que las mujeres: falso, una investigación de la Universidad de Cambridge demostró que las mujeres superan a los hombres en capacidad de memorizar datos

• Los hombres son más orientados que las mujeres: el estereotipo es cierto, así lo demostró un experimento de neurocientíficos noruegos que tuvieron participantes que tenían que orientarse en un laberinto virtual. Los hombres llegaban antes a su destino que las mujeres