Hace 23 años los atentados terroristas del 9/11 en la ciudad de Nueva York cambio por completo la forma en la que viajamos. Aún recuerdo aquel día en la universidad, pues todos veíamos con cierta inocencia e incredulidad, algo que parecía de película, pero que tristemente era una realidad. Para suerte mía me encontraba en la carrera que tendría que analizar estos acontecimientos, Relaciones Internacionales, algo que sobre todo en la materia de geopolítica estudiaríamos a detalle y que incluso, inspiró la nota sobre los 9 documentales y películas para entender mejor lo que sucedió este día, ya que han sido contenidos que me han ayudado a entender, aún más, lo que en mi tiempo toco estudiar por medio de columnas, textos, reglamentos etc.

Irónicamente al momento de la redacción de este artículo, me encuentro en un avión recordando todas las cosas que cambiaron y que justo me ha tocado vivir, pues por cuestiones de estudios, me tocó viajar a Nueva York un año después de lo acontecido en el World Trade Center.

¿Cómo es ahora el proceso de embarque en vuelos internacionales tras el 9/11?

Anteriormente el proceso de revisión para entrar a las salas de embarque no tenía esa exhaustiva revisión que en algunos casos lleva a que nos quitemos los zapatos, chamarras y que, si tienes un poco de mala suerte, hasta te toca una revisión “aleatoria” que muchas veces es por demás excesiva. Justo esta madrugada me tocó ver como a la pasajera que iba justo delante de mío, le revisaban “hasta las ideas” pasando los primeros controles de seguridad en la terminal 2 del AICM. No obstante en los últimos años, en esta parte del aeropuerto, tienen una actitud propia de guardias de un penal de máxima seguridad. Regresando a lo que sucedió con la pasajera, su rostro era incredulidad y sobre todo incomodidad, ya que la revisión si rayó en lo excesivo, su mirada lo decía todo, solo le quedó el suspiro de resignación un poco en tono de ya estar acostumbrada a esto. No todo terminó ahí, ya que justo antes de entrar al avión, para mala suerte de ella, porque coincidimos en el mismo vuelo, le tocó otra revisión. A mí me han tocado varias de estas y créanme que también me parecen algo excesivas, sobre todo porque todos pasamos por el primer control en donde literalmente nos escanean todo. En estos controles aleatorios suelen pasar un papelito por todo lo que llevas, para después pasarlo por un lector. Aquí algunas veces me ha tocado que incluso te piden abrir todo lo que traes e incluso quitarte los zapatos para buscar, que se yo cosas, finalmente no soy un especialista en seguridad.

Llegando a Estados Unidos, algunos oficiales de migración (me consta que no todos), dependiendo la suerte, te preguntan cosas dignas de una entrevista para evaluar tu nivel socioeconómico que “¿Cuándo fue la última vez que viniste? ¿Dónde perdiste tu pasaporte? (si supiera… no lo habría perdido), ¿dónde te quedaras? ¿quién pago tu viaje? ¿A dónde vas? ¿En dónde te quedas? ¿A quién visitas? ¿Cuánto dinero traes en efectivo? Etc. Y si por cualquier cosa por no tener la pericia o la experiencia, dudas en cualquiera de estos cuestionamientos, segurito te toca cuartito. Así que toma en cuenta que cuando viajes, con escala en cualquiera de los principales aeropuertos de la Unión Americana, debes de contemplar al menos unas 2 horas o dos horas y media en tu escala.

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¿Todo este texto se lee exagerado? Quizá sea porque a ti no te tocó vivir la experiencia de los vuelos internacionales antes del 9/11, porque aunque no lo creas, las cosas antes de estos atentados, eran muy distintas y todo este proceso, era por decirlo, algo más placentero y agradable. Se que muchas de estas “nuevas” medidas son por la seguridad de todos, pero esto no debe de esta peleado con el buen trato y una que otra sonrisa, pues muchos esperamos que la experiencia de viajar, siempre sea algo agradable y sobre todo memorable.