Cien años de soledad: No es una vida mal vivida, es una realidad permanente

Pocos autores han logrado resonar tan fuerte en la memoria latinoamericana como Gabriel Garcia Márquez, premio Nobel de Literatura, quien en 1967 presentó su obra maestra: Cien Años de Soledad, una de las novelas más traducidas y leídas en el mundo desde entonces y que se ha tratado de adaptar a la pantalla con malos resultados. El mismo García Márquez llegó a decir que su novela no cabía ni en dos horas ni en dos películas de dos horas, pero sí en cien capítulos de una serie. ¿Lo logrará? Curiosamente, esta afirmación parece haber sido una premonición ya que Netflix lleva la historia a la pantalla como serie, no con cien capítulos, sino en 2 partes de 8 episodios.

Tomar la historia de una novela con tantos saltos temporales y en la que la magia está en la imaginación de cada lector es el reto inmenso que tiene esta serie para ver si atrapa al espectador. Lo que si te podemos decir es que cuidaron todos los detalles: el elenco sólido y la producción.

La primera parte de esta serie tarta de un pueblo que es fundado por una pareja de primos, los Buendía, que huyen de su pasado y de la posibilidad de tener hijos con cola de cerdo. En este místico lugar, varias generaciones vivirán historias de amores intensos y guerras interminables rodeados de extravagancia y realismo mágico, lo cual era el sello distintivo de Gabo.

'Cien Años de Soledad’ nos invita a sumergirnos en la magia a través de una producción impresionante capturando lo complejo de una historia universal sobre el amor, la pérdida, la soledad y la condición humana. Sin embargo, sí creemos que la novela es muy difícil de adaptar. Y aunque tiene una producción y diseño de arte maravilloso, la historia, al trasladarla a la pantalla, pierde toda la magia de lo que los espectadores podemos imaginar como lectores.