Towers of Aghasba, previo: un buen juego de supervivencia, hundido en pequeños errores.
Hay mucho carisma en este título, pero también fallas
El género de supervivencia se ha vuelto una parte relativamente popular de la industria de los videojuegos desde la salida de Minecraft. Muchas veces, los títulos nuevos parecen ser simplemente clones, que poco aportan a este tipo de juegos. Towers of Aghasba trata de llenar algunos huecos que este tipo de juegos tiene, pero descuida funciones básicas mientras lo hace.
Historia
La tribu de los Shimu ha estado buscando recuperar su civilización. En su búsqueda por un nuevo hogar, han encallado en la isla de Aghasba. Tú eres una aprendiz de constructor que busca ayudar a su pueblo a prosperar. Sin embargo, seres míticos ligados a la naturaleza desconfían de ti y tus amigos. ¿Somos los humanos simplemente destructores? ¿O podemos encontrar una forma de desarrollarnos en un modo sostenible?
Agregar una buena dosis de historia ayuda a que un juego de supervivencia tenga un poco más de emoción. Cada miembro de la tribu te irá entrenando en los artes de la supervivencia, mientras que los habitantes de la isla te mostrarán cómo cuidar de ella.
Jugabilidad
Si has jugado algún título de este género, sabrás los gajes del oficio; conseguir recursos, conseguir herramientas, desbloquear tecnologías, etc. Hasta aquí, Towers of Aghasba es como cualquier otro. Lo que lo distingue es que no sólo progresas en el conocimiento y creación de edificios y herramientas, sino que también puedes ir mejorando el medio ambiente al mismo tiempo . En una de tus misiones conoces a un duende y al Dios del Bosque. Ellos te muestran cómo mejorar su medio y ganar favores de la naturaleza restaurada. Todo a través de la Armonía. Esta estadística sube cuando ayudas animales, plantas árboles o mejoras el ambiente. Y baja al cazar animales o talar árboles frescos. Es importante mantener el equilibrio en el juego, llevando un mensaje de sostenibilidad consigo.
El gran problema con Aghasba es cómo se siente al jugarlo. Los controles parecen normales al principio. Pero conforme exploras y construyes, te das cuenta de que el control no es de lo más preciso. Aunado a esto: los artículos que recoges en el piso están marcados con flechas demasiado pequeñas y tenues. Esto lleva a perder valioso tiempo, ya que se amotonan o simplemente no están donde marca la flecha. A veces tu personaje se atora en la geometría del escenario al escalar. Y hasta tuvimos un muy raro error donde los peces aparecían flotando inmóviles fuera del agua.
Los menús no están bien distribuidos, y es fácil perderse entre interminables pantallas y selecciones.
Gráficos y sonido
Los gráficos dan un muy refrescante giro mientras juegas. De un terreno completamente inhóspito y gris, pronto se va llenando de exuberante vegetación y animales por doquier. Realmente es un festín para los ojos conforme avanzas en tu progreso. Los efectos de sonido no impresionan al mismo nivel, y a veces se sienten sosos y sin impacto. La música es genérica y desaparece en el fondo mientras juegas.
En su estado actual, Towers of Aghasba necesita trabajo aún. Sus mecánicas son interesantes pero se vuelven repetitivas. Y sus constantes errores son notorios. Hay un gran juego, bastante divertido aquí. Pero está detrás de una gruesa capa de errores y malos controles. Afortunadamente es un juego de Acceso Anticipado, por lo que todo esto podría mejorar en un futuro.
Por Rolando Vera
Periodista, creador de contenido, dibujante y experto en Retail de videojuegos a nivel internacional. Colaborador de Meristation y Los 40 México desde 2017, reseñando gadgets y videojuegos; y creando contenido en streaming. Ha formado parte de los equipos de Publimetro, IGN Latinoamérica y Bitme en Televisa. En su experiencia comercial ha trabajado con compañías como GameStop, Target, así como Best Buy y Wal-mart en 3 países (México, EE.UU. y Canadá). Además es analista de mercado para el segmento de videojuegos en reportes internacionales como Circana (antes NPD) en EE.UU. y Canadá, GFK en el Reino Unido y Games Sales Data en Francia. Actualmente ocupa el puesto de National Account Manager para México y Latinoamérica de la compañía de accesorios de videojuegos Turtle Beach. Sus anteriores experiencias laborales fueron en Planeación, Compras, Marketing y Producción en Wal-Mart de México y Centroamérica, Danone, Unilever y Procter & Gamble.