Análisis del nuevo álbum de Justin Bieber ‘SWAG’ ¿su mejor o peor obra?

Primeras impresiones del nuevo álbum de Justin Bieber: SWAG.

Justin Bieber está de regreso con un nuevo álbum de estudio titulado SWAG. El cantante canadiense lanzó sin advertencia esta nueva obra musical, causando un gran impacto en el mundo del entretenimiento.

Pero, tras cuatro años de inactividad desde Justice, uno de sus mejores álbumes, es inevitable comparar sus discografías y preguntarse si esta nueva era supera a la anterior.

SWAG: el futuro con guiño al pasado

Para quienes han sido fanáticos de Justin Bieber, o que aún se consideran beliebers, la palabra swag tiene connotaciones mucho más profundas de lo que podría tener para un oyente casual. Es imposible no pensar en el Justin adolescente, vestido de morado, con Supras y gorras que comenzaba su carrera con entusiasmo y confianza.

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La elección del título definitivamente fue deliberada, pero ¿qué intenta decirnos Justin Bieber a través de esto?

Swag representa a alguien con una confianza absoluta en sí mismo, un estilo personal que marca tendencia. Aunque está asociada a la cultura del hip-hop, también puede simbolizar esa seguridad con la que Bieber ha decidido regresar, sin intentar agradar a los demás, siendo simplemente él mismo: con una actitud swag.

Una ventana a la intimidad de Justin Bieber

Las letras de las canciones de Justin se han vuelto más personales con el paso del tiempo. Conforme ha crecido y madurado, nos ha dejado ver parte de sus heridas, fracasos y renacimiento.

Justin Bieber y su hijo Jack en una foto promocional para su disco 'Swag' / Universal Music

SWAG retoma ese estilo lírico en el que, en muchas ocasiones, parece que estás escuchando una conversación casual entre Justin y su esposa Hailey Bieber, sus amigos, o consigo mismo. El hecho de que haya incluido skits (pequeños fragmentos de pláticas y conversaciones con terceros) refuerza esta sensación de cercanía.

Pero, al mismo tiempo, la producción de SWAG hace que el álbum se sienta inconcluso, casi como el borrador de lo que debería ser el álbum a futuro.

Justin Bieber es uno de los artistas pop más grandes del mundo, por lo que escuchar un material que parece más propio de un artista independiente, con tracks de un minuto y canciones que suenan como demos, puede resultar desconcertante y confuso para el oyente, sobre todo tras producciones como Justice.

Sin embargo, tras oír el disco completo da la impresión de que este no es un álbum para el mundo, sino para él mismo.

Justin no parece estar intentando romper récords en las listas de reproducción, ni crear el próximo éxito del año, sino simplemente hacer la música que necesitaba y quería hacer, sin pretensiones ni expectativas. Es un disco acorde a su contexto, las emociones y palabras que tenía guardadas y que vive en su día a día.

Aun si eso significa repetir una sola melodía una y otra vez como en Dadz Love o incluir una charla sin sentido con uno de sus amigos, como en Therapy Session o Standing on Business. Es el reflejo de su realidad actual: la transición de ser la estrella mundial a ser Justin, el esposo; Justin, el papá primerizo; Justin, el ser humano.

¿Es SWAG su mejor álbum?

SWAG definitivamente no es su mejor obra en términos musicales, pero sí es su trabajo más crudo.

La falta de producción resulta en una analogía perfecta de su intención: mostrarse lo más real posible a través de su música.

Pero eso no quiere decir que es su peor álbum. Es simplemente un disco que está para el que quiere escuchar lo que Justin tiene que decir, para su fan más leal o el que gusta de producciones más serenas.

Lo mejor de SWAG

Es necesario reconocer que dentro del álbum hay algunas canciones buenas, que tienen un estilo más sofisticado, un sonido más familiar o una buena letra.

En ese sentido, First Place, Daisies, Butterflies, Walking Away y Devotion, son nuestra selección de este álbum.

Por otro lado, es lindo ver la forma en que Justin se muestra como el mayor fan de su esposa a través de Go Baby o cómo no se aleja del todo de sus creencias, en Forgiveness.

Con este álbum, Justin muestra el proceso de depuración por el que todo artista ha pasado, o pasará. Ese puente entre una era y otra en el que se permite experimentar. Así que probablemente tendremos noticias de él muy pronto, con nueva música y un nuevo estilo.