Death Stranding 2: On the beach, análisis de una secuela que simplemente no termina de cuajar

El primer Death Stranding fue el primer proyecto de Hideo Kojima luego de su estrepitosa salida de Konami. Asegurando diferencias irreconciliables, inició su propio estudio de video juegos llamado: Kojima Productions. Death Stranding recibió elogios de la mayoría de la prensa especializada. Sin embargo, existieron detractores bastante vocales sobre la indulgencia de las auto referencias del Sr. Kojima y la completa falta de diversión del título. “Un aburrido simulador de caminata”. Death Stranding 2: On the Beach ¿es más de eso mismo? A continuación te damos nuestro veredicto final trabajado de la mano de 3 personas dentro de la redacción.

Historia

La historia en general de esta saga describe cómo la humanidad quedó separada luego de un incomprensible apocalipsis sobrenatural llamado el Death Stranding. Sam Bridges fue el héroe que volvió a conectar a los ex Estados Unidos (hoy UCA) y desapareció junto con su unidad BB (un bebé llamado Lou).

Existe un tema central donde la sociedad misma busca renacer y parte de lo que nos hace humano es el deseo de conexión y pertenencia. También está una crítica a la forma en la que los Estados Unidos moldea la geopolítica. Y un último toque de cuidado a la biodiversidad y el ambiente. Pero toda esa seriedad está oculta bajo toneladas de eventos y personajes sin sentido. Desde los nombres de los personajes (Un hombre hecho de partes de muertos = ¡Deadman! Un hombre que tiene brea en vez de mano = ¡Tarman!) hasta chistes de fluidos corporales y muñecos vivientes. El argumento es toda la parafernalia militar y política que pierde por completo su seriedad y credibilidad debajo de estas cosas. El hecho de que su lore sea extenso, no quiere decir que sea bueno.

Es cierto que al final todo se resuelve, pero no de la mejor manera. Su obsesión con la cultura americana lo llevó a tomar decisiones cuestionables que si bien, para los fans pueden parecer brillantes; terminan por no aportar nada a la trama. O peor aún: dejar de manifiesto que toma decisiones por puro gusto y no en beneficio del jugador.

Jugabilidad

Lleva un paquete de A a B. Eso es. Tal cual. Camina, camina y camina hasta que lo logres. Trata de no llevar demasiado. Intenta no tropezar. Cuídate de bandidos en el camino. Y también de la lluvia y los temblores o de los muertos que acechan. En medio de todo eso, reconstruye la infraestructura de un país.

Hemos jugado muchos otros simuladores en esta redacción: de granjas, de trenes, de camiones, administración de hospitales, etc. Pero Death Stranding 2: On the beach simplemente no es entretenido. Pasan varias horas antes de que consigas mejor equipo, vehículos y enemigos más amenazadores. Y cada cinemática es larga. Todo se libera a cuenta gotas y es exasperante.

Es gracias a la comunidad en línea es que de pronto la experiencia se vuelve un poco más tolerable, cuando entre todos se ponen a levantar caminos o monorrieles. Pero cuando te toca con “vividores” que no hacen otra cosa más que esperar a que los demás hagan el trabajo pesado, se vuelve todavía más frustrante.

Gráficos y sonido

Tal vez Kojima sea uno de los peores guionistas de la industria, pero si algo sabe es de Dirección de Arte. El apartado gráfico es impecable e impresionante. Cada personaje está totalmente detallado, y las estrellas invitadas son idénticos a sus contrapartes digitales.

En cuanto al sonido, el doblaje en la versión en Español Latinoamericano es de primer nivel. Sólo una tontería franca: ¿por qué Guillermo del Toro no usa su propia voz en esta versión? De vez en cuando suenan canciones que rompen el silencio de los páramos desolados. No son malas, sólo se sienten como otra innecesaria forma de Kojima de decir “Es mi juego y yo hago lo que quiera”, replicando justo lo mismo del juego anterior.

Conclusión

Death Stranding 2: On the beach no va cambiar lo que viste en el primero. Si eres fan de Kojima vas a amar cada segundo, aunque en muchas cosas es una calca del anterior solo que con mejores visuales. Si lo que buscas es un juego entretenido o que tenga algo de sentido, es mejor buscar en otro lado.

Calificación: 6.5

Por Rolando Vera, Rafael García y Vladimir Arteaga