Metal Gear Solid Delta: Snake Eater, análisis de un clásico que regresa con nuevos gráficos con cambios sutiles que se agradecen
Un viaje en el tiempo a la Guerra Fría con Naked Snake, demostrando que la esencia de un clásico no necesita cambiarlo todo para triunfar de nuevo

El remake Metal Gear Solid Delta: Snake Eater esta por llegar este 26 de agosto y gracias a una oportunidad que tuvimos por parte de Konami de jugarlo una buena cantidad de horas en la ciudad de Nueva York hace algunas semanas, es que finalmente podemos dar nuestro veredicto final, ya que también tuvimos acceso a la versión final de PC.
Un juego que ha envejecido bien
Una de las cosas que más preocupa de este tipo de remakes, es si el juego ha “envejecido” lo suficientemente bien como para que las mecánicas, historia y el ritmo te atrapen como lo hizo en su tiempo. Metal Gear Solid Delta: Snake Eater es de esos pocos que lo logra con creces, ya que todos sus elementos se conjugan en una experiencia que bien vale revisitar o conocer de nuevo y que deja claro que Hideo Kojima es un genio, pues esta entrega es un aluvión de elementos que nos mantienen al borde del sillón en todo momento. Algunas veces por conocer más del lore y otras por las ganas de seguir avanzando para conocer el desenlace.
Para los que no conocen el argumento este se desarrolla durante la Guerra Fría, por medio de los ojos de Naked Snake (más tarde será el Big Boss), siendo así una suerte de “precuela” de lo que sería la serie.
Este remake se mantiene fiel a la historia y al gameplay que como tal definieron un género y que actualmente se puede encontrar en varios títulos, es más el agregado de supervivencia podría decirse que surgió con esta entrega, ya que el tener que estarse alimentando, curando etc. son factores clave que en su tiempo, rompían hasta cierto punto un paradigma.


Continuista con algo más que un lavado de cara
Para los fanáticos de la serie es un gran reencuentro que nos eriza la piel desde el primer minuto, pues ver esta entrega con este nivel de detalle es algo asombroso. Para los nuevos jugadores es una experiencia digna de nueva generación que bien puede tomarse con un libro de texto que define el inicio del género y que se puede disfrutar muy bien tanto en resoluciones de 4K en consolas, en su máxima expresión en PC (si esta lo permite) e incluso en plataformas portátiles como la Steam Deck o la Rog Ally X.
Los controles son prácticamente los mismos, con cambios sutiles en el layout que permiten acceder de una manera más ágil a los menús, algo que podríamos decir “incrementa” el reto es la nueva perspectiva en primera persona que es un poco más cerrada, pero al mismo tiempo se siente más inmersiva.
Algo que desde siempre gustó mucho de este juego, es ese pequeño elemento de juego de supervivencia por medio de los camuflajes y de las heridas que no debes de descuidar si es que no quieres complicarte la vida, esto hace que nuestro personaje se sienta vivo y le da un dinamismo muy particular.
Es una realidad que por momentos encontraremos esas complicadas tomas que pueden aturdirnos un poco al momento de enfrentar a un enemigo, pero el hecho de que se haya trabajado bajo un nuevo motor gráfico lo ha aminorado un poco.


Gráficos
Visualmente, ahora las lesiones que sufrimos se van quedando, así que, si queremos que Naked Snake permanezca como los clásicos James Bond, tendremos que tener cuidado, porque si no, llegaremos con una buena cantidad de marcas de guerra al final.


Los cambios con respecto del original
La primera mejora palpable son los visuales, sin duda uno de los más espectaculares es cuando cruzamos el pantano con el agua hasta el pecho, esa perspectiva es digna de cualquier película de Hollywood por el nivel de realismo que tiene.
Como lo mencionamos con anterioridad algunos menús y layouts tienen un acceso más simple por medio del D-Pad, pero algo que quizá pase desapercibido es que algunas charlas que tendremos tienen cambios ligeros que “lo renuevan” en algunos contextos, no daremos spoilers de cuales son, pero si eres un conocedor del título original, sin duda te robaran una sonrisa por el cuidado que tuvieron en ello.


Esta entrega tambié ofrece dos modos de juego para la cámara y los controles:
- Legacy
- y el Nuevo
El primero es tal cual el control y la cámara del juego original, el nuevo por su parte tiene esos cambios sutiles que hemos mencionado que valen la pena, de hecho, a nuestro parecer seas un veterano de la serie o un jugador nuevo, sugerimos empezar en este último.
También añade nuevos elementos desbloqueables, como trajes adicionales y un nuevo tipo de coleccionables que sin duda agradecerán todos aquellos que gustan de “peinar” el campo para obtenerlo todo.


Conclusión
Metal Gear Solid Delta: Snake Eater podría ser el mejor remake de este año, sus adicionales y cambios respetando la obra original son cosas que se agradecen, sobre todo porque se ve que los desarrolladores le inyectaron un cario y atención particular enfocado en los amantes del juego original, buscando acercar a las nuevas generaciones a uno de los títulos más memorables de todos los tiempos.
Calificación: 9

Vladimir Arteaga Figueroa
Especialista de tendencias, lifestyle, Inteligencia Artificial, tecnología y videojuegos en Radiopolis...


