Stray Kids regresa con un buen ‘KARMA’ para repartir: Reseña del nuevo álbum

Stray Kids hizo su comeback este 22 de agosto de 2025 con KARMA, su cuarto álbum en coreano, sucesor del exitoso 5-STAR (2023) y del mini álbum ATE (2024). La expectativa era enorme y el grupo no decepcionó: en 11 canciones y 32 minutos, los idols muestran un lado poderoso, honesto y maduro.

Bang Chan, Lee Know, Changbin, Hyunjin, Han, Felix, Seungmin e I.N han vivido un año arrollador con su gira mundial DominATE, presentaciones en festivales internacionales y premios tanto en Corea como fuera de ella. Pero su camino no siempre fue fácil. Como muchos artistas que logran destacar en la industria, Stray Kids tuvo que labrar su trayectoria con esfuerzo, luchando por sobrevivir y enfrentando críticas constantes.

En KARMA, dejan claro que ya no son los mismos chicos que debutaron hace siete años: sino un grupo que compite en las grandes ligas y están listos para reafirmar por qué son uno de los grupos líderes de la cuarta generación del K-Pop.

Reseña de 'KARMA'

El álbum se compone de 11 canciones con una duración de 32 minutos. A través de un flow intenso, letras audaces y guiños a su pasado, Stray Kids cobra su “karma” frente a quienes alguna vez los subestimaron.

Bleep, el tema de apertura, refleja muy bien ese sentimiento de orgullo, confianza y determinación:

"El peso en mis hombros es una mezcla de carga y orgullo. Si ver esto (mi éxito) te incomoda, si así es como te sientes respecto al esfuerzo de otros, entonces el problema eres tú”, dice parte de la letra.

Durante toda la canción, el grupo aborda el constante “hate” que reciben y la actitud con la que lo enfrentan: ignorarlo y seguir construyendo su futuro.

Una frase que encapsula el espíritu del álbum también está en este track: “My vida sólo se alarga, este es mi destino y lo acepté hace mucho tiempo”. Con un verso tan simple, Stray Kids se muestra no como víctima, sino como ocho chicos que transformaron un sueño en realidad a base de trabajo duro y constancia: resiliencia en su máxima expresión.

En esa misma línea, Creed llega como una declaración no sólo de sus metas, sino también de sus valores como artistas. Hablan de cómo han marcado su propio ritmo y tendencia en lugar de dejar que la industria los defina.

Más adelante, el grupo muestra su lado más vulnerable en Mess, donde retratan el duelo por la pérdida de alguien importante y la lucha por seguir adelante. Es, sin duda, la canción más emotiva del álbum, un tema sobre nuevos comienzos y sanación emocional.

Por su parte, Half Time funciona literalmente como un medio tiempo. Al igual que en cualquier juego deportivo, representa una pausa para recuperarse, replantear estrategias y volver con fuerza para ganar. Aquí se sienten claras las referencias deportivas: “besar mi anillo”, aludiendo a los anillos de campeonato de la NFL, y otras expresiones que ya habían explorado en ATE con alusiones al Super Bowl y S-Class.

Esta canción retoma elementos musicales de Case 143 y S-Class, mezclando la era pasada con lo que está por venir. Como lo dice su propia letra: “Crees que ya viste todo de nosotros, pero apenas fue el primer tiempo; prepárate para el remate”.

La segunda mitad: honestidad y esperanza

En la segunda mitad del álbum encontramos un tono menos jactancioso y más honesto, que refleja la inseguridad y el cansancio que sienten los integrantes. Se trata de la paradoja de vivir el mejor momento de tu vida, cumpliendo tus sueños, pero sintiéndote agotado de esa vida, al mismo tiempo.

Un sentimiento con el que muchos jóvenes pueden identificarse. Sin embargo, en lugar de quedarse en la frustración, aparecen canciones como 0801 y Phoenix, que se sienten como un abrazo al corazón, un recordatorio de que pese a la fatiga y las dudas, todo estará bien al final. Habrá valido la pena el esfuerzo invertido.

La evolución Musical de Stray Kids

En lo musical, Stray Kids entrega temas muy sólidos como Bleep, Creed, In My Head y 0801. Cada una tiene identidad propia, con una producción madura y audaz. Ritmo y letra se complementan de manera natural, transmitiendo el mensaje sin caer en lo forzado.

Finalmente, Ceremony, Half Time y Phoenix reafirman el legado que está construyendo Stray Kids. Más allá de sus logros, su música lleva el sello distintivo del grupo en la producción, la letra y el ritmo. Hay familiaridad, pero también la seguridad de que son apuestas fuertes para consolidarse como sencillos principales del álbum.