Gaslighting: Una forma casi imperceptible de abuso emocional; Conoce sus características
Las relaciones amorosas no siempre son color de rosa, más cuando una de las partes aplica este tipo de manipulación que afecta la percepción de la realidad de su pareja
El gaslighting es una sutil forma de manipulación emocional. / Kinga Krzeminska
Si dentro de los conflictos que tienes con tu pareja cuando expresas algo que te incomodó, terminas pensando con frecuencia que estás exagerando o dudando de los argumentos por los que inició una plática que al final se convirtió en una discusión, debes de saber que estás cayendo en una forma de manipulación emocional: el Gaslighting
El amor no siempre es color de rosa, en muchas ocasiones la persona que parece ser nuestro príncipe azul en realidad es el villano que nos drena la paz. En esta ocasión platicaremos del Gaslighting, una de las formas más sutiles de abuso emocional.
¿Qué es el Gaslighting y por qué es una forma de abuso emocional?
Se le llama gaslighting a una forma casi imperceptible de manipulación emocional. La finalidad de la persona que lo aplica dentro de una relación amorosa, es que la pareja dude de la confianza que tiene en su memoria, sus instintos y que muchas veces afecta también su autoestima, para no hacerse responsables de las acciones que afectan la relación.
Por lo que de acuerdo a Melissa García Meraz, psicóloga de la Facultad de Psicología de la UNAM esta técnica consiste en manipular a una persona hasta hacerla dudar de sus percepciones, opiniones o recuerdos, lo que termina causando ansiedad en la parte afectada.
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Quien aplica el gaslighting, busca, en última instancia, mantener el control sobre la víctima, sobre la situación y sobre la relación.
Cuando la víctima cae en este tipo de manipulación, se queda con dudas o incluso sintiendo que está enloqueciendo, permitiendo que sus abusadores ganen poder sobre su propia realidad.
Características del Gaslighting
El gaslighting se puede distinguir porque el que lo aplica busca deslindarse de su responsabilidad y solo ve por sus intereses al minimizar los sentimientos de la otra persona o confundirla:
- Mentira y negación: El manipulador miente y niega sobre alguna acción suya, incluso cuando se le muestran pruebas
- Desplazamiento del foco: Cambia de tema cuando lo confrontan o culpa a la víctima invirtiendo los papeles.
- Restar importancia: el gaslighter minimiza los sentimientos de su pareja, diciendo que exagera o que lo que hizo solo era una broma.
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Así que ya lo sabes, no estás exagerando, ni estás enloqueciendo; eso que te incomodó es real y esa mala acción sí ocurrió. Lo más sano es platicar de lo que a ambas partes les llega a afectar y si por alguna razón sientes de sentir la confianza que tenías de hablar sobre el tema, posiblemente te están haciendo Gaslighting.
