Metal Eden, análisis del "boomer shooter" que pone la diversión por encima de todo
Analizamos a fondo un juego frenético y explosivo que destaca por su combate, a pesar de sus limitaciones de presupuesto
Muchas veces te encuentras con juegos que sabes que no son el próximo hitazo. Que de lejos puedes ver sus deficiencias y se puede saber fácilmente donde se le pueden agregar o quitar cosas que lo harían un mejor juego. Y muchas veces puedes solo ignorar todas esas ideas simplemente porque en el momento que tienes el control en las manos te la pasas increíble. Metal Eden es ese juego.
Esta entrega es lo que hoy categorizamos casualmente como un “boomer shooter”, es decir, un juego de disparos en primera persona en donde la idea no es ponerte a cubierto y esperar a que tu vida se regenere sino, más bien, moverte y saltar frenéticamente por arenas de combate mientras disparas armas enormes y acabas con ola tras ola de diferentes enemigos. Fue desarrollado por Reikon Games, quienes dan un giro de perspectiva (literalmente) en su estilo, ya que su único juego anterior, Ruiner, es un juego de disparos con vista “top down”.
Durante Metal Eden tomaremos el papel de Aska, una hiper unidad (que quiere decir androide de combate), quien tiene el objetivo de liberar a los ciudadanos de una ciudad orbital llamada Moebius. Para esto, tendrás que obtener los Núcleos Alfa de unos seres llamados Ingenieros con la ayuda de un ente misterioso llamado Nexus.
El juego presenta su historia a través de unos pocos diálogos durante las misiones y una cinemática entre cada una de ellas. Es en este primer aspecto en donde se vuelve muy aparente que Metal Eden es un juego de un alcance y presupuesto muy reducidos, más parecido a un indie con disfraz de juego AAA que otra cosa. En las cinemáticas los personajes casi no se mueven y no articulan con la boca. Los diseñadores, en vez, fueron listos en utilizar movimientos de cámara, encuadres, texto sobrepuesto, estética y otros efectos para dar la ilusión de que algo está pasando, cuando en realidad solo estamos escuchando a alguien hablar y un robot está en pantalla. De hecho, hay una cierta cinemática de Aska lanzándose a la acción que reciclan como cuatro veces, cada una cambiando un poco aspectos de fondo, pero la animación, los encuadres y todo es exactamente los mismo.
Con esto, la historia es simplemente un vehículo que te permite ir de un tiroteo a otro. Eso sí, puedo decir que las actuaciones de voz son decentes (excepto Aska, quien tiene a lo mucho diez líneas de dialogo en todo el juego) y que la trama me mantuvo lo suficientemente entretenido para querer saber a dónde iba todo. Pero, lo que realmente me mantuvo pegado al control durante las casi 8 horas que dura Metal Eden es el combate.
Este título tiene uno de los mejores sistemas de disparo de un shooter moderno. Puedo decir que está a la altura de los juegos que claramente lo inspiraron, como Ghost Runner y Doom. El juego es frenético, en donde una sola duda durante el combate puede significar la muerte. Tiene arenas de combate que te permiten saltar de una pared a otra mientras te impulsas con tu jet pack, activas tu slow-mo y llenas de balas a un grupo de enemigos.
La mecánica única que diseñaron para el combate es la Extracción de Núcleos, un movimiento que te permite arrancar el corazón (metafóricamente hablando) de un androide enemigo para obtener más munición o absorberlo para cargar un super golpe que reventará la armadura de cualquier enemigo lo suficientemente desafortunado para estar frente a ti.
Los combates fueron bien pensados alrededor de esta mecánica, ya que la mayoría de los enemigos grandes poseen una capa de armadura claramente identificada por una barra de salud verde. Mientras avanzas en el juego, aprenderás sobre las diferentes maneras de reventar esta capa de armadura de la forma más rápida y eficiente posible, ya sea con un super golpe, un arma de plasma, una granada o el ya conocido barril explosivo. El baile que se genera entre escoger el arma adecuada en el momento adecuado, brincar de una plataforma a otra para tener al enemigo en la mira y priorizar un enemigo sobre otro hace que jugar Metal Eden sea una experiencia tensa, retadora y muy divertida.
Para el final del juego, tu armamento consistirá en siete armas completamente diferentes sobre las cuales estarás cambiando constantemente para usar la más adecuada para lidiar con el enemigo que tienes enfrente. Sumado a esto, a lo largo de las misiones te encontrarás con un robot que vende mejoras, en donde puedes escoger entre dos modos de disparo alternos para cada arma. Esto le brinda mucho sabor y expresión al combate, ya que cada jugador se sentirá más cómodo con un modo específico. Yo, por ejemplo, opté por ponerle una mira al subfusil para poder dar tiros a la cabeza a lo lejos, la opción alterna era un mini lanzagranadas.
La otra manera en que Metal Eden te permite personalizar la manera en la que juegas es a través de su árbol de habilidades. Al pasar ciertas arenas un pequeño robot te otorga un núcleo de habilidad el cual puedes usar para modificar ciertas acciones, como reducir el tiempo para tu siguiente Extracción de Núcleo, hacer que Aska expulse una ola de hielo que congela enemigos al perder tu blindaje, incrementar el radio de la explosión al lanzar un núcleo y otras cosas. Obtener estos puntos eleva considerablemente tu fuerza y la manera en que te aproximas a ciertos enfrentamientos ya que, si va sintiendo una diferencia notable, sobre todo cuando ya tienes varios puntos.
Hay una última mecánica única que distingue a Metal Eden, y esa es la forma de pelota que puedes usar como Aska. Es muy obvio que alguien en Reikon Games es muy fan de Metroid, ya que al hacer clic en el stick izquierdo puedes volverte una pelota para rodar a través de los escenarios. En la forma de pelota tienes acceso a un rayo y unos micro misiles para hacer algo de daño a enemigos, pero, la verdad es que la forma de pelota se siente como algo que se agregó al juego como capricho, ya que, aunque es útil para moverte a través de dos niveles que tienen espacios un poco más abiertos, nunca se siente que como que la pelota sea necesaria para avanzar en lo absoluto. De hecho, 90% del juego me olvidé por completo de que estaba ahí. Solo cuando el juego me recordó con un pop-up tutorial que podía transformarme es que la use. El uso tan desperdiciado del modo pelota solo me hizo pensar que es un esfuerzo que se hubiera utilizado en mejorar otros aspectos del juego.
Pasemos ahora a hablar de las gráficas. Metal Eden es un juego hecho en Unreal Engine, el conocido motor gráfico que es especialmente bueno para crear ambientes industriales y este juego no es la excepción. Recorrerás una infinidad de ambientes industriales, futuristas y metálicos estilo Cyberpunk. Si alguna vez jugaste Doom 2016, viste Ghost in the Shell o jugaste algo de Cyberpunk 2077 se te hará muy conocido. Todo entorno se ve bonito, pero ya lo hemos visto antes, de hecho, si no fuera por cambios dramáticos a la iluminación de cada nivel podría decir que casi todo el juego se ve igual. Esto solo habla más de lo bueno del combate, ya que el diseño casi igual de los niveles no interfirió con mi disfrute en lo absoluto.
En cuanto a desempeño realmente casi no tuve problemas. Metal Eden cuenta con los ya conocidos modo Performance y modo Quality. El modo Performance fue como jugué todo el juego y mantiene los 60fps estables que ya se esperan. El modo Quality baja considerablemente los cuadros por segundo y sube un poco la resolución, pero no es muy notorio y el impacto que sufre el juego no hace que valga la pena usarlo. Si eres uno de los pocos que tiene un PS5 Pro, te gustará saber que hay un modo para ti. Si hablamos de problemas presentados durante mi tiempo con el juego, tuve unos pocos enfrentamientos en donde los fotogramas bajaron por un segundo en momentos en que la acción se puso muy explosiva. También tuve un solo hard crash que me hizo reiniciar la consola, pero fue un evento aislado.
Conclusión
Metal Eden es un juego para los amantes de los FPS con mucha acción. Tiene grandes mecánicas de disparos, una buena variedad de armas, buen diseño de arenas de combate y una progresión que se siente lineal pero efectiva. El juego es corto y se ve que está pensado para rejugarlo varias veces cada vez en dificultades más altas. Si eres alguien que juega videojuegos por la historia, Metal Eden no es para ti, ya que como mencioné antes se cae mucho a la hora de contar una historia y las cinemáticas, aunque bonitas, se ven extremadamente básicas.
Con una base tan sólida en el combate, esperemos que Reikon Games pueda hacer una secuela como se debe y nos de el juego que siempre han querido hacer.
Metal Eden ya está disponible para PlayStation 5, Xbox Series X|S y Steam en PC. Les recomiendo que chequen la demo gratuita, ya que muy fácilmente les dirá si este juego es para ustedes o no.
Calificación: 7.5
Por Carlos Izcoa
Publirrelacionista con especial énfasis en la industria de videojuegos con más de 9 años de experiencia. Ha trabajado con empresas de tecnología mundiales, como HONOR, The Pokémon Company, Twitch, OnePlus, Square Enix, Bandai Namco y Activision Blizzard desarrollando sus estrategias de comunicación y campañas de lanzamiento
Vladimir Arteaga Figueroa
Especialista de tendencias, lifestyle, Inteligencia...Especialista de tendencias, lifestyle, Inteligencia Artificial, tecnología y videojuegos en Radiopolis y Prisa Brand Solutions para México, LATAM y US Hispanics. Colaboro con W Radio y Los 40 Mx. Soy responsable de LATAM / US Hispanics del portal de habla hispana especializado en videojuegos, películas, tecnología y entretenimiento, Meristation.