¿Kendrick Lamar fracasó en México? Así se ve la venta de boletos a días de su concierto en el Estadio GNP Seguros

A cuatro días de que se lleve a cabo el concierto de Kendrick Lamar en Ciudad de México, aún existe una amplia disponibilidad de entradas para el evento. La venta de boletos generalmente indica la demanda y aunque muchos artistas logran agotar las entradas hasta el día del evento o de plano sobran lugares, generalmente, a días del evento, son pocos los asientos disponibles.

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El hecho de que aún haya boletos en casi todas las zonas del Estadio GNP Seguros, habla de la poca demanda y el triste recibimiento que tuvo el público para el artista. Ante este panorama es inevitable cuestionarse ¿cuál fue el error? ¿Por qué el rapero no está vendiendo entradas?

Te presentamos algunas de nuestras teorías al respecto.

No hay suficiente fan base

Aunque suena poco creíble, ya que Kendrick Lamar es uno de los artistas más populares hoy en día, especialmente tras su presentación en el Super Bowl del 2025, podría ser que no sea lo suficientemente popular en México como para llenar un recinto con capacidad de 60 a 65 mil personas.

Recordemos que Lamar ya había visitado nuestro país en el 2024, en el festival AXE Ceremonia, donde alrededor de 50 mil personas asistieron el día que se presentó. Si bien en un festival es normal que no todo el público asistente esté ahí por un sólo artista, es seguro decir que al menos dos terceras partes compró su entrada para ver al rapero. Especialmente porque era el artista principal del día y no había otros artista tan grande que le compitiera.

Entonces, fans mexicanos, tiene. Si el AXE Ceremonia no fue suficiente demostración, el Tecate Pa’l Norte es otra prueba de ello. Que pese al desenlace, muchos de los asistentes iban con el deseo de verlo a él en vivo.

Aunque no sería de extrañar que este sea el caso de su poca venta de entradas. Pues parece que el hip hop y el rap no es un género tan fuerte en México como el pop, rock y el regional. Una situación similar sucedió en el concierto de Post Malone, donde las entradas terminaron rematándoselo al 2x1.

El desplante del Tecate Pa’l Norte

Aunque hay prueba de que Kendrick Lamar tiene capacidad de convocación, quizá sus fans no son tan leales como los de otros artistas o son más escuchas casuales que venían siguiendo una tendencia, más que verdaderos fans.

Lo que nos lleva a la teoría dos: pérdida de interés tras el desplante que tuvo con el público mexicano en el 2024.

Kendrick Lamar tenía dos presentaciones programadas en aquel año, ambos festivales. Su primera fecha fue en Ciudad de México, y la segunda en Monterrey.

Su primer concierto estuvo increíble y tanto la critica como los asistentes lo elogiaron. Sin embargo, cuando iba a presentarse en Monterrey, el rapero canceló su show al último minuto, dejando a miles de fans plantados sin una explicación convincente.

La actitud de Kendrick no fue bien vista por los asistentes al festival norteño, quienes habían viajado por horas e invertido mucho dinero para verlo. ¿Podría ser que aún está latente el resentimiento colectivo?

Los precios

Finalmente, la teoría más obvia es la del precio de los boletos. Es muy probable que para los fans de este rapero, el precio no valga lo que cuesta. Esta teoría cobra fuerza al analizar el mapa del evento, pues las secciones más económicas son las únicas agotadas.

Ejemplo, los boletos para NA de la sección 17 a la 30, es decir las más lejanas al escenario, estaban en un costo de $1,085 y los verdes antes conocidos como C, estaban en $1,575 pesos.

A partir de ahí, los boletos tienen un costo de $2,184 a $4,258 pesos.

Y aunque tiene sentido, esta teoría también tiene una falla: comparándolo con otros conciertos recientes, los precios de Kendrick Lamar no están excesivos. En realidad son muy comparables a los precios de Oasis, quiénes tuvieron dos fechas sold out y más baratos que los de Shakira, quien hizo 12 fechas llenas en el mismo recinto.

No quiere decir que los precios sean económicos sólo porque otros artistas tienen precios más caros; pero es un importante referente de lo que está dispuesto a pagar un fan por ver a su artista favorito en México. Lo que nos hace pensar que Kendrick aún no consigue ese nivel de influencia en el país.