El Chavo del 8 llega a Saturday Night Live con Bad Bunny interpretando a Quico
El popular show revive a los personajes de la vecindad en un sketch lleno de nostalgia y referencias clásicas

El icónico personaje de la televisión mexicana, El Chavo del 8, ha vuelto a ser el centro de atención. En un inesperado pero aclamado giro, el programa de comedia estadounidense Saturday Night Live (SNL) dedicó un sketch al universo de Roberto Gómez Bolaños, conocido como "Chespirito". Este segmento, parte del estreno de la temporada 51 de SNL, capturó la esencia del show original, llevando a los personajes de la vecindad a un nuevo público.
Un reparto de estrellas para la vecindad más famosa
El sketch de SNL presentó un elenco estelar que rindió homenaje a los personajes clásicos de la serie. Marcello Hernández, un comediante de ascendencia cubana y dominicana, interpretó al Chavo, replicando su inocencia y su gorro icónico. El anfitrión del episodio, el cantante Bad Bunny, se puso en la piel de Quico, adoptando sus característicos cachetes inflados y su peculiar tono de voz, en un papel que originalmente inmortalizó Carlos Villagrán.
A ellos se unieron Sarah Sherman como La Chilindrina y el actor Jon Hamm, quien hizo una breve pero memorable aparición como el Profesor Jirafales, el eterno enamorado de Doña Florinda. A pesar de la ausencia de Doña Clotilde, "La Bruja del 71", el sketch se mantuvo fiel a la dinámica de la serie.
Reviviendo los momentos clásicos de El Chavo
El guion del sketch en SNL recreó situaciones y diálogos de El Chavo del 8. Desde los pleitos entre Don Ramón y Quico, hasta las famosas cachetadas de Doña Florinda, el segmento estuvo lleno de referencias. Además, incluyó elementos distintivos como las risas grabadas y los efectos de sonido que definieron el estilo del programa original.
Un momento clave del sketch fue el diálogo entre los personajes. La icónica frase "¡Tóma torta!", el miedo de Don Ramón al Señor Barriga que viene a cobrar la renta, y las interacciones entre los niños se adaptaron para el público estadounidense sin perder su humor característico. Este enfoque demostró el impacto cultural y la atemporalidad del show de Chespirito, que sigue siendo relevante décadas después de su creación.
El legado de "Chespirito"
El Chavo del 8 no es solo un programa, es un fenómeno global. Su popularidad se disparó rápidamente, alcanzando una audiencia masiva en toda Hispanoamérica y más allá. Para 1975, se estimaba que el show era visto por más de 350 millones de personas semanalmente, un testimonio de la genialidad de Roberto Gómez Bolaños. La reciente parodia en Saturday Night Live confirma que el legado de El Chavo sigue vivo, conectando con nuevas generaciones y celebrando el humor y la nostalgia de una vecindad que todos llevamos en el corazón.

Vladimir Arteaga Figueroa
Especialista de tendencias, lifestyle, Inteligencia Artificial, tecnología y videojuegos en Radiopolis...


