Little Nightmares 3, análisis de una pesadilla corta pero hermosa

El otro día, mientras veía la película de El extraño mundo de Jack (A Nightmare Before Christmas), me acordé porque Little Nightmares es una de las sagas de juegos independientes que más he disfrutado en los últimos años. Su bizarro, terrorífico, pero a veces juguetón diseño de personajes y escenarios, mucho de ellos similares a los que podemos ver en la cinta de Tim Burton, me generan una sensación de angustia y curiosidad única, como si se tratarán de pesadillas de las cuáles no me quiero despertar para conocerlas más a detalles.

Y luego de jugar y terminar la última entrega de esta serie, Little Nightmares 3 puedo confirmar con gusto que el estilo incómodo, bizarro, desconcertante, pero al mismo tiempo muy atractivo y llamativo se mantienen o incluso mejoran para esta entrega.

Aquí les cuento un poco más a detalle.

Un viejo conocido

Seamos claros, Little Nightmares 3 no contiene realmente ninguna innovación central a la mecánica del juego que no hemos visto al menos en sus dos entregas centrales para consolas. Se trata de un side scroller en escenarios 3D donde tienes que ir resolviendo acertijos, escapando de enemigos y haciendo una combinación entre empujar, jalar, escalar o mover objetivos para avanzar.

La mayor innovación para Little Nightmares 3 está en sus dos personajes a controlar a Low, un niño con máscara de cuervo; y Alone, una niña con una máscara de gas. Ambos tienen los mismos movimientos, sin embargo, su principal diferenciador es que Low tiene un arco para interactuar o atacar a ciertos enemigos y Alone lleva una llave inglesa a su espalda para romper objetos como paredes o golpear enemigos.

Fuera de ese ligero cambio, Little Nightmares 3 no ofrece ninguna otra modificación real al modo de juego. Eso no quiere decir que el juego sea aburrido, simplemente que sigue siendo el mismo juego que los jugadores conocieron en 2017 cuando llegó por primera vez a consolas con la aventura de la misteriosa Six.

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Amigos de verdad

Lo que sí es un cambio central es que Little Nightmares 3 es el primero de la serie que puedes jugar a la It Take Two o Split Fiction, es decir con un amigo, con el que puedes compartir todo el juego. Sin embargo, debo confesar que a diferencia de esos juegos, en donde el trabajo en equipo y la colaboración entre ambos era muy creativa y esencial, en Little Nightmares 3 existe, pero a momentos se siente más limitada por elementos como: yo empujo esto para que me suba o tu tira eso para que lo agarre.

Hay momentos muy notables como las batallas con ciertos enemigos o algunos puzzles particulares, pero de ninguna manera el modo colaborativo tiene la misma esencia o emoción que hemos visto en otros títulos. Eso no quita que el gusto de poder compartir un universo tan particular como el de Little Nightmares 3 es algo a destacar, habría sido algo interesante que Bandai Namco y Supermassive se animarán a probar lo que hizo Electronic Arts y Hazelight hicieron de solo comprar una copia y dejar que un amigo tuyo pudiera jugar sin tener que comprar el juego. Para Little Nightmares 3 si quieres jugar con un amigo ambos tendrán que comprar el juego.

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Sensación agridulce

Debo confesar que Little Nightmares 3, similar a las otras entregas, me deja con extraño sabor agridulce luego de terminar. Me parece que es sin duda el título visualmente más poderoso de toda la saga, los personajes, escenarios y cuartos que te tocan explorar en el mundo de Nowhere no solo son estresantes y tenebroso, sino que también son altamente hermosos, con un diseño cuidado gráfico impecable.

A momentos me quedé más tiempo explorando el cuarto o escenas para tratar de apreciar la enorme cantidad de detalles que los desarrolladores pusieron en todos los elementos para verdaderamente hacerte sentir como en una pesadilla compleja de describir y constantemente incomoda. En particular sin dar muchos spoilers el mundo de la feria, me parece que es quizá uno de los escenarios más atractivos que he jugado en mi vida como gamer. A eso súmale un diseño de audio y sonido, espectacular que hacen que esa tensión o escalofrío estén presentes en todo momento.

Sin embargo, Little Nightmares 3 me dejó un tanto insatisfecho como lo han hecho los otros títulos por querer más. El juego se siente muy corto, si acaso unas 5 horas máximo seis de principio a fin y particularmente esta entrega la sentí mucho más fácil en términos de dificultad que las anteriores, lo cual hizo que mi paso por Little Nightmares 3 se sintiera mucho más corto de lo que me esperaba. Y sin mucho pretexto para volver a jugar fuera de pasar el juego usando al otro personaje.

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Conclusión

Como siempre digo en las reseñas ¿Vale la pena Little Nightmares 3? Para mí es un claro sí como fanático de la saga, es un universo hermoso, un juego divertido y muy bien hecho. Mi problema es que si bien es más barato que un título normal (40 dls vs 70 dls), se siente corto y fácil para el gasto. Sin duda es una aventura que todo amante del género no debe perderse y que sin duda recomiendo, mi gran tema es si esa inversión vale la pena día uno o es mejor esperar a que el título baje de preció o se venda en paquete con las demás entregas en caso de que no hayas podido jugar las dos primeras partes. Pero sin importar en qué momento decidas jugarlo créeme que va a ser una pesadilla que vas a disfrutar mucho.

Calificación 8

Por Carlos Fernández de Lara

Amante de los videojuegos y la tecnología, periodista apasionado por el contenido que ha trabajado en CNN México, Forbes México y Excélsior. Vive de contar buenas historias, ama todo lo que tenga que ver con contenido en video y todo lo publicado por FromSoftware.