Amores Perros 25 Años después: El éxito inesperado y la vigencia de su conflicto interno

Alejandro González Iñárritu, una de las figuras más importantes del cine contemporáneo, ha reflexionado con nosotros sobre el legado de su ópera prima, Amores Perros, en el marco de su 25 aniversario y el reestreno de una versión restaurada en 4K. En esta entrevista para De Estreno el director describió la trascendencia de la película, no como un objetivo planeado, sino como un "misterio y un milagro" forjado por la conexión del público y el mérito del trabajo cinematográfico.

Esta cinta no solo redefinió el rumbo del cine mexicano, sino que también transformó la vida de su equipo. Según Iñárritu, el proceso le brindó la oportunidad de construir una "familia cinematográfica", con la que colaboraría en sus siguientes cuatro proyectos, abriéndole definitivamente las puertas de la industria a nivel internacional.

¿Por qué la película se convirtió en un "milagro" colectivo?

Desde su estreno en el año 2000, la película capturó la identidad de una época y la memoria colectiva de la Ciudad de México. El cineasta enfatizó que la obra es simultáneamente "histórica y atemporal", logrando retratar un momento específico de la ciudad, mientras aborda temas universales. La única señal que delata su antigüedad es la ausencia de teléfonos celulares en manos de sus protagonistas.

La vigencia de Amores Perros reside en su esencia: es una obra que combina una mirada artística y una profunda conciencia política, manteniendo una relevancia contemporánea, incluso un cuarto de siglo después.

La condición humana: ¿Cuál fue el secreto de la construcción de personajes?

El núcleo temático del filme siempre se centró en explorar la condición humana, el dolor y la culpa. El director subrayó que el conflicto central de la cinta siempre fue interno a cada personaje. Para lograr esta profundidad, Iñárritu destacó la contribución del guionista Guillermo Arriaga, cuyo talento y visión permitieron diseñar personajes "muy contradictorios, muy complejos, muy humanos".

El proceso de creación fue meticuloso. Junto a los actores, dedicaron horas de ensayo a profundizar en el subtexto de cada línea, entendiendo que el cine no solo trata de lo que se dice, sino de cómo se dice. Este enfoque les permitió esculpir personajes que podían representar "una gran cantidad de emociones contradictorias y al mismo tiempo verdaderas". Además, el director recordó la icónica banda sonora de la película, cuya curaduría, liderada por Gustavo Santaolalla y con la colaboración de Lyn Feinstein, se convirtió en un álbum que ahora es una leyenda.

El fresco cinematográfico: ¿Qué implica la restauración para el espectador?

Iñárritu hace un llamado a las nuevas audiencias para que no se conformen con ver la película en una pantalla pequeña, como una "postal". La obra fue concebida en gran formato para el cine, como un "mural fresco", y es en la sala oscura donde se vive el impacto completo. La restauración a 4K, liderada por el director junto a Rodrigo Prieto (fotografía) y Martín Hernández (sonido), garantiza esta experiencia visual y auditiva original.

• La restauración del negativo, un trabajo técnico minucioso, trajo consigo beneficios clave para el público:
• Corrección Digital 4K: Rescató el negativo que sufría erosión debido al proceso Silver Retain, manteniendo la integridad del color y el brillo original.
• Más Información Visual: El nuevo escaneo a 4K ofrece mucha más información y detalle en la imagen.
• Mezcla de Sonido Mejorada: Renovación de la pista de audio con opciones de 5.1 o 7.1, asegurando una inmersión completa.

Finalmente, sobre los periodos de silencio entre sus proyectos, Iñárritu afirmó que la verdadera fuente de inspiración para sus siguientes películas es "vivir" y tener una vida "bastante ordinaria", demostrando que para crear arte trascendente, a veces, solo se necesita estar presente.