Adiós a la teoría de la dimensión paralela en Stranger Things: El Mundo del Revés es en realidad otra cosa. Todos los detalles

Durante casi una década, tanto los fanáticos como la prensa especializada hemos teorizado incansablemente sobre la naturaleza del "Mundo del Revés" (The Upside Down). Hasta ahora, la creencia popular y la narrativa sugerían que Hawkins estaba conectado a una dimensión espejo, un plano alternativo oscuro y decadente. Sin embargo, la información más reciente sobre la quinta y última temporada de Stranger Things de Netflix ha dado un vuelco total a esta premisa, llevando la trama del terror sobrenatural a la ciencia ficción dura.

Lo que creíamos que era una realidad paralela mágica o espiritual es, en realidad, un fenómeno astrofísico explicable. Todo apunta a que la serie cerrará su ciclo basándose en conceptos científicos reales, alejándose de la fantasía pura para darnos una resolución más tangible.

¿Qué es realmente el Mundo del Revés según los nuevos datos?

La gran revelación que cambia el juego es que el Mundo del Revés no es una "dimensión" en el sentido místico, sino una suerte de “dos planetas” conectados físicamente. Según los últimos episodios del Volumen 2 la serie, lo que une a la Tierra con este lugar hostil es un agujero de gusano.

Esto significa que el lugar donde reside Vecna no está "debajo" de nosotros ni en una frecuencia invisible vibrando en el mismo espacio, sino en otro punto del universo (o multiverso) accesible únicamente a través de una distorsión en el espacio-tiempo. Este cambio de paradigma implica que los personajes no están cruzando un velo fantasmal, sino viajando a través de un puente cósmico, lo que valida las teorías más científicas que personajes como Dustin o el Sr. Clarke plantearon en temporadas anteriores.

¿Qué son exactamente los agujeros de gusano y quién definió el término?

Para entender el final de la serie, es vital comprender qué es este fenómeno. Un agujero de gusano, conocido en física como un puente de Einstein-Rosen, es una estructura hipotética que conecta dos puntos distantes en el espacio-tiempo. Imaginen que el universo es una hoja de papel; si quieren ir de un extremo al otro, el camino es largo. Pero si doblan la hoja y la atraviesan con un lápiz, crean un atajo instantáneo. Ese atajo es el agujero de gusano.

Aunque la teoría base fue desarrollada por Albert Einstein y Nathan Rosen en 1935, el término "agujero de gusano" (wormhole) fue acuñado mucho después. Fue el físico teórico estadounidense John Archibald Wheeler en 1957 quien popularizó este nombre para describir estos túneles cósmicos. Wheeler es una figura legendaria en la física, responsable también de popularizar el término "agujero negro". Que Stranger Things adopte este concepto eleva la narrativa, sugiriendo que la energía necesaria para abrir estos portales en la serie (como la que posee Eleven) es inmensa, capaz de curvar la propia realidad.

¿Cómo impacta esto el final de la saga?

Este giro hacia la ciencia ficción clásica proporciona nuevas reglas para el enfrentamiento final. Al dejar de ser un concepto abstracto, los protagonistas pueden buscar soluciones "físicas" para cerrar la brecha definitivamente.

El uso de agujeros de gusano implica varios cambios clave para la temporada 5:

• El viaje es físico, no espiritual: Los personajes deben atravesar una distancia real, aunque acortada, lo que aumenta el peligro de quedar atrapados en el "puente".
• La inestabilidad del portal: Según la física de Wheeler, estos agujeros suelen ser inestables. Esto podría explicar por qué las grietas en Hawkins están colapsando la realidad.
• El factor tiempo: Los agujeros de gusano teóricamente permiten el viaje en el tiempo, lo que podría justificar los rumores sobre saltos temporales para deshacer el daño de Vecna.

El último episodio de Stranger Things 5 se perfila no solo como una batalla contra monstruos, sino como una lucha por restaurar las leyes de la física antes de que ambos mundos colisionen. La temporada final promete ser un espectáculo visual y narrativo que honra tanto al cine de los 80 como a la ciencia real.