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Jackson, de 46 años y
acusado de abuso sexual de un menor, caminó con pasos cortos y vacilantes,
hacia la sala del tribunal, y parecía estar muy dolorido según sus gestos.
El médico, Bert Weiner, miembro del Hospital Cottage, en Santa Ynez, se
dirigió hacia la cámara del juez para hablar a puertas cerradas, y
permaneció en la primera fila del tribunal cuando se reanudó el testimonio.
Durante la conferencia en
el despacho del juez, Jackie, hermano de Jackson, y un guardia de seguridad,
escoltaron al cantante al baño. Cuando regresó a la sala, se lo vio llorar
frente a la mesa donde se sienta su abogado, con un pañuelo de papel sobre
el rostro. Parecía tener dificultades para sentarse y para ponerse de pie.
Jackson es acusado de
abusar sexualmente de un menor de 13 años entre febrero y marzo del 2003,
tras darle una bebida alcohólica. También se lo acusa de conspirar para
mantener cautiva a su familia a fin de obligarla a hacer un vídeo donde se
negaban las aseveraciones de un documental de la televisión. En ese
documental, Jackson apareció tomado de la mano del niño, y dijo que permitía
a los niños dormir en su cama, aunque no lo hacía por razones sexuales.
La fiscalía ha dicho que
podría concluir la parte del caso relacionada con el presunto abuso de
menores posiblemente esta semana. Luego, piensa concentrarse en las
acusaciones de conspiración. El juez no ha dictaminado aún si la fiscalía
puede presentar evidencias de pasadas acusaciones de abuso sexual de menores
en contra de Jackson. |