Más selfies, menos sexo.

Las personas fanáticas a sacarse selfies sugestivas no tienen una vida ideal. Un investigador holandés quería saber qué hay detrás de esta conducta cuando se torna adictiva. Y encontró algo muy sorprendente.

 Muchas personas, y entre ellos hay una larga lista de famosos, son adictas a las selfies sensuales, y lo que encierra este hábito es mucho más que egocentrismo o narcisismo: en realidad, es una llamada de auxilio ante la falta de sexo.