Trabajos de buena paga
Los trabajos mejor pagados y que nadie quiere
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A pesar de la crisis económica, del creciente desempleo y de la desesperanza por encontrar trabajo, existen puestos que están bien pagados y muy poco demandados. Las características de ellos y el esfuerzo físico o mental que suponen no les hacen del todo atractivos, aunque no dejan de ser muy necesarios para la sociedad.
Sexador de pollos
Saber el sexo de los pollos sin margen de error no es un trabajo demasiado atractivo para los británicos a los que ofrecen más de 4.500 euros ($74 380.60 pesos mexicanos) al mes por él. Al menos tres años de formación hacen falta para saber con rapidez si es hembra o macho el animal, por lo que no es nada fácil. Además, se requieren unas 12 horas al día de trabajo de observación de mil pollos a la hora en las que solo pueden determinar el sexo en unos cuatro segundos. Solamente se puede fallar en un 2% o 3%, una presión que hace que casi ningún británico quiera echar su currículum.
Si en el trasero del animal hay un bulto significa que es macho, sino es hembra. También puede pasar que, a veces, si los cogen por el cuello y se quedan tiesos es que son de sexo masculino pero si son féminas se revolverán entre las manos.
Tanatopractor
Este empleo es comúnmente conocido como maquillador de cadáveres, aunque el trabajo va mucho más allá de eso. La tanatopraxia es el conjunto de técnicas químicas de desinfección, de embalsamiento y maquillaje para que el cuerpo sin vida pueda dar el último adiós disimulando ciertas enfermedades visibles en la piel o accidentes que hayan dejado heridas físicas. Ya se sabe que la muerte no entiende de crisis económicas y este empleo tampoco. El salario puede rondar los más de 2.000 euros ($33 058.0434 pesos mexicanos) al mes y solo necesita un curso de formación para que se adquieran las capacidades para esta complicada labor.
Se necesita que la persona también tenga una buena estabilidad mental, ya que no todas las personas pueden sentarse durante horas ante cuerpos de personas muertas. Incluso en los cursos se valora si se está capacitado, o no, para ser tanatopractor.
Enterrador
Al igual que ocurre con el trabajo de maquillador de cadáveres, el de enterrador también requiere mucha fuerza mental, además de física. No solo hay que enterrar el ataúd, sino que además hay que estar durante un tiempo alrededor de la familia en ese momento tan duro. El ambiente de este empleo son los cementerios de los pueblos o ciudades, por lo que tampoco resulta ser agradable. Hay muchos pueblos que tienen su propio enterrador, otros que lo buscan, y es un trabajo que ronda los 1.000-1.500 euros ($24 793.5325 pesos mexicanos) al mes, un salario que quizá sea subjetivo de críticas por el esfuerzo que se requiere.
Limpiador de fachadas
En Madrid y en muchas grandes ciudades del mundo es común ver edificios enormes y altísimos que sorprendentemente están muy limpios. No tienen por qué ser solo cristales, sino también fachadas en general, pero en cualquier caso se juegan la vida y se ponen en riesgo, algo que no está demasiado bien valorado si se tiene en cuenta el salario que cobran, algo más de los 1.500 euros ($24 793.5325 pesos mexicanos) al mes. Algo parecido podría ser los trabajos de limpieza de calles y recogida de basuras, un empleo nada agradable cuyo salario gestionan, en su mayoría, los ayuntamientos, por lo que no siempre está bien pagado del todo.
Deshollinador
El empleo de limpiador de calderas y chimeneas no es demasiado agradable aunque en tiempos de crisis cada vez son más los que se han apuntado a él. Está bien pagado hasta cierto punto, ya que, si se tiene en cuenta que es un empleo muy sacrificado, cobrar entre los 1.200 y los 2.000 euros ($33 058.0434 pesos mexicanos) al mes no parece ser suficiente. Hoy en día hay muchas empresas y demandas que han devuelto este trabajo del olvido a la necesidad de ofertas debido a la crisis económica de muchas familias que se ven obligadas a cambiar las elevadas facturas de gas y luz por estufas, por ejemplo.
Trabajador en planta petrolífera
Un empleo de cualquier tipo en una planta petrolera siempre requiere un gran esfuerzo muy duro ya que se tiene que estar en pleno mar abierto, con calor o frío dependiendo de la estación del año. Ya sea de maquinista, perforador, ingeniero, electricista o de mecánico, son trabajos que requieren asumir riesgos físicos y psicológicos pero que están bien pagados en función de la cualificación y de las funciones. Los factores externos a la cuenta bancaria como por ejemplo, las largas horas laborales que hay que invertir, hacen que la gente se piense mucho esta oferta antes de aceptar.
Minero
Los riesgos que asumen las personas que trabajan dentro de una mina es elevadísimo y las condiciones que tienen que soportar ponen en entredicho su integridad física. Entre estos trabajadores hay diferentes tipos de puestos (ayudantes, picadores, barrenistas...) y depende de esto lo que se cobre, pero normalmente el salario está bien pagado, además de tener una pre-jubilación bastante abultada y antes de tiempo, dadas las circunstancias que deben soportar en la minería. Según las estadísticas, más de la mitad se jubilan a los 50 años pero no son recolocados en trabajos que ya no requieran tanto esfuerzo físico.