Muñeca sexual viviente

Victoria Wild, una modelo originaria de Latvia (Letonia), gastó miles de dólares para convertirse en la muñeca sexual viviente.

Victoria se aumentó el tamaño de los labios, se hizo la cintura más estrecha y se puso implantes de pecho y de glúteos, entre otras cosas.

Para ella todo empezó cuando tenía 25 años y hoy, cinco años después, afirma estar muy feliz por el cambio que ha tenido.

“Siempre fui muy delgada y blanca. Desde pequeña todo mundo me decía que parecía una Barbie, pero yo no me sentía bien, necesitaba cambiar mi imagen”, explicó Victoria.

Según el diario Daily Telegraph, la persona que ha pagado por todas las cirugía es el novio de la modelo. “Mi novio está muy contento con mi apariencia, cree que es muy sexy y le resulta muy excitante”, afirmó Victoria.