Rareza arquitectónica
Construye una casa con 12.000 botellas de champagne
Ubicado en la ciudad de Chelyabinsk, en Rusia, hay una casa construída en su totalidad por botellas de champagne. La rareza arquitectónica es obra de un residente local, Hamidullah Ilchibaev, de 52 años. Se le denomina como el “Palacio de Oz” y se ha transformado en un lugar popular de la región.
La idea de la casa no fue casualidad, sino que él siempre estuvo interesado en construir cosas con las botellas de cerveza y de vodka. Sus hijos siempre admiraron su trabajo y lo alentaron a hacer una vivienda algún día. Sin embargo, pensaba que eso era imposible.
Cuando Hamidullah perdió a su segundo hijo, quien trágicamente murió a los 18 años, decidió hacerla en su memoria y comenzó a buscar los materiales necesarios.
Para hacer la excéntrica obra de 99 metros cuadrados, recolectó alrededor de 12.000 botellas vacías de champagne durante el curso de tres años. Algunas fueron consumidas por él y otras donadas por restaurantes cercanos.
“Al empezar, no había imaginado que hay tantos modelos diferentes”, contó. Luego, descubrió que no sólo varían en el color sino también en la calidad. Tenía de todas las formas y estilos y las cortó a todas al mismo tamaño. Luego, las utilizó como si fuesen ladrillos apilándolos sobre una base sólida. Entre cada ejemplar colocó una solución química que las solidifica firmemente en su lugar y también mantiene la casa templada. Hacia afuera apuntan la base de cada una de las botellas y las paredes son verdes. Por dentro, parece una casa tradicional.
Hamidullah asegura que la construcción es tan fuerte que espera que permanezca por al menos 100 años. De hecho, la ha montado de tal forma que si una de las botellas se rompe, puede ser fácilmente reemplazada. Sorpresivamente, su costo es cinco veces menor que si hubiese utilizado materiales tradicionales. Al terminarla, se la entregó a su hijo mayor y su nuera aseguró que espera ansiosa poder amueblarla.