Hacen concurso de belleza para los cadaveres

En Japón, limpiar y arreglar a los cadáveres se ha convertido en todo un arte

A sus 27 años la joven Sayuri Takahashi participó en un concurso de especialistas en el arreglo y vestido de los muertos antes de las exequias y la incineración, una profesión en declive en las grandes ciudades japonesas, y en menor medida en los pueblos.

Takahashi se arrodilla con gracia junto a una mujer inmóvil y la viste a la luz de velas artificiales, un suceso que ha dado mucho de qué hablar en los medios sociales.

Por primera vez en el país, los especialistas del "nokan" participaron en una competición. Los participantes dispusieron de 15 minutos para vestir delante del público y los jueces a modelos tumbadas en futones, mientras un guitarrista toca una melodía.

"Queríamos que el público conociera mejor a los 'nokanshi', escasearon mucho después del desastre de 2011", declaró el organizador del concurso Koki Kimura en alusión al terremoto y tsunami que causaron más de 18.500 muertos en el noreste de Japón en marzo de ese año.

Las modelos llevaban puesto una especie de vestido de ceremonia para ocultar la piel, el método más empleado, por pudor, para vestir el cuerpo cuando la familia está presente. Los especialistas les ponían las prendas por debajo de ese vestido, que luego retiraban para que se viera el resultado final.

"La gentileza y la cortesía con la familia del difunto y la eficacia son esenciales", explicó Shinji Kimura, uno de los tres jueces del concurso de nokanshi organizado esta semana en Tokio.

Al final, se da a conocer que por primera ocasión en el país, los especialistas del nokan que participaron en una competencia.