Artículos de uso cotidiano que no sabías que tienen caducidad
Además de que pierden su forma, después de 3 años, las almohadas se convierten en nido de ácaros.
Los cepillos deben cambiarse al menos cada año. Las cerdas naturales de los cepillos pueden conservar muchas bacterias.
Exceder el uso de dos años de los multicontactos podrían causar cortos circuitos muy peligrosos.
Después de tres meses de abiertos, todos los desinfectantes pierden su efectividad.
De qué sirve usar brasiere si ya no te ajusta. Los bras pierden su elasticidad y forma después de 1 año o 2.
Los cepillos de dientes también son guarida de muchas bacterias. Después de tres meses es recomendable cambiarlos (también cuando nos resfriamos). Por otra parte, te sugerimos no guardarlos dentro del baño pues aumentan las bacterias en ese ambiente.
Las defensas de los bebés son muy bajas y objetos de uso diario pueden enfermarlos seriamente. Los chupones y biberones deben cambiarse a lo mucho cada mex. El látex de estos productos se agrieta y rompe, provocando que se junten ahí los microbios.
Las pestañas funcionan como protector de tus ojos y usar una máscara de pestañas que hayas usado hace más de tres meses, podría causarte infecciones.
La humedad y la suciedad de las esponjas de baño hacen que su durabilidad sea de dos semanas pero puedes hervirlas para eliminar todas las bacterias.
¿Hongos en los pies? Seguro es por tus pantuflas viejas. Comunmente este tipo de calzado guarda mucha suciedad y no deja respirar tu piel. Cada seis meses debes cambiarlas.
El olor del perfume desaparece tres años después si el frasco no se ha abierto y dos años después de abrirlo.
Después de 5 años los portabebés ya no son igual de seguros para tu pequeño. Comprar uno usado o reciclar para el nuevo bebé puede arriesgar su vida.
Después de un años de correr maratones, ir al gimnasio diario o usarlos para el súper, los tenis ya no amortiguan la pisada y no sirven de absolutamente nada.
Si tu toalla lleva más de 3 años de uso ¡tírala ya! Estas conservan muchísimas bacterias y ni el exceso de lavado ni secarlas al sol te ayudará.
No porque algo no tenga fecha de expiración significa que dura toda la vida. Los productos del hogar pueden ser muy peligrosos si seguimos usándolos a pesar de su caducidad.