La versión del profesor interrumpido por sus hijos en noticiero
Él y su esposa han hablado. Esta es la historia detrás del adorable videobomb
En cuestión de minutos el profesor Robert Kelly y su familia ya eran la familia más viral en el mundo. El hombre, colaborador en un noticiero de CNN fue interrumpido por sus adorables hijos durante una entrevista en vivo. Su esposa (no, no era la niñera), intentando salvar el asunto, llegó a sacar a los niños de la habitación y se convirtió en el rescate más torpe y divertido de internet.
La historia detrás de la niña que se la llevó el viento
Pero después de la tormenta viene la calma y aunque para la familia pudo ser un momento muy incómodo, al ver las reacciones en internet, no pudieron reir del asunto.
"Estúpida, mi pelo idiota". Esto pasó con Esteban, el meme más famoso.
En una entrevista para The Wall Street Journal, el profesor Kelly y su esposa fueron entrevistados y esto fue lo que dijeron:
"Fue terriblemente adorable, vi el video como todos. Mi esposa hizo un trabajo increíble al arreglar esta situación como mejor podía... fue divertido. Si ven el video, yo intentaba ahogar mis risas, son niños y así es como sucede", dijo Kelly.
Kim Jung-A, su esposa, aseguró que su esposo normalmente le pone seguro a la puerta: "La mayoría de las veces ellos regresan a mí si encuentran la puerta cerrada. Pero esta vez no lo hicieron. Cuando vi la puerta abierta, fue caos para mí".
Pero ¿qué estaba haciendo la mujer que descuidó a sus hijos? Ella y los niños veían la colaboración de Kelly en la sala de estar. Ella estaba grabando el noticiero con su celular y el retraso en el video de Kelly, no le hizo notar que los niños se habían ido con su padre, hasta que los vio en televisión.
Por otra parte, Kelly confesó por qué su hija entró con tanto entusiasmo a la habitación "Marion había celebrado en su escuela su cumpleaños número 4".
Respecto a las críticas que ha recibido por no haberle prestado atención a sus hijos, el profesor aseguró que había quedado en shock y no sabía exactamente qué hacer pero al mismo tiempo intentaba que sus hijos no se sintieran rechazados.