Una cárcel donde los reos escapan pero luego regresan por sí mismos

Desde hace algunos años, el Departamento de Policía de Atlanta comenzó a investigar a los presos que “escapan temporalmente” de la penitenciaría estadounidense de mediana seguridad de esta ciudad, los policías creen que los presos escaparon a través de agujeros cortados en la cerca de la prisión.

Un día los oficiales notaron un coche estacionado cerca de la línea de la cerca de la prisión. La gente dentro llevaba máscaras de esquí y monos. Cuando los policías se acercaron, los sospechosos brincaron la cerca y regresaron a la cárcel, según muestran los archivos de la corte.

Desde entonces, la policía ha vigilado frecuentemente el área. A finales del año pasado, los oficiales descubrieron dos agujeros del tamaño de una persona en la cerca. Cerca había una bolsa de lavandería con ropa, guantes, un reproductor de MP3 y varias bolsas de basura. Así que un mes después instalaron cámaras de vigilancia a lo largo de la cerca de la prisión, y durante las tres semanas siguientes, los policías observaron cómo los presos escapaban para regresar con bolsos grandes e introducirlos en la prisión.

Sin embargo, en una de las fugas un recluso no corrió con mucha suerte. Justin B. Stinson escapó por la cerca y tomó una gran bolsa, pero mientras trataba de regresar a la cárcel, agentes del FBI lo arrestaron. Durante el registro a Stinson, el FBI encontró en el interior de la bolsa un teléfono celular, un par de tijeras, dos botellas de 1,75 litros de tequila, seis cajetillas de cigarros y un poco de comida.

Recientemente se hizo pública esta erupción de fugas y retornos, que incluye la detención de un reo y de su novia, que según los documentos judiciales, escapó para tener relaciones sexuales con su novia y es además el sospechoso de ofrecer una especie de servicio de chofer particular para los presos, que consistía en recoger y entregar encargos de los presos que desearan salir a visitar restaurantes, hoteles y mercados cercanos.

La oficina del fiscal federal en Atlanta, el FBI y la Oficina de Prisiones continúan la investigación de las prácticas de esta curiosa cárcel.