¿Sufres del síndrome del trasero muerto?
Y no, no hablamos de las pocas nalguitas

(Getty Images)
No es mentira eso que dicen de que ya de todo se enferma uno. Entre los múltiples males que podemos pescar existe uno de nombre: síndrome del trasero muerto.
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A este achaque también se le conoce como amnesia glútea y se desarrolla en personas cuyas vidas son demasiado sedentarias, ¡así es!, en aquellos individuos que no despegan la nalguita de lugar por un largo tiempo.
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El glúteo medio, quien es el encargado de estabilizar la pelvis, se atrofia a causa de la inactividad física. En respuesta a ello, con el paso del tiempo el músculo va perdiendo su fuerza y lo siguiente para el cuerpo es buscar suplir a este músculo que se ve perjudicado.
De manera natural el cuerpo encuentra la fuerza que le falta en la espalda (muy comúnmente en la espalda baja) o en las rodillas. Esto provoca un dolor ya que los músculos están haciendo doble esfuerzo.
Pensaríamos que un deportista no tendría que preocuparse por este padecimiento, sin embargo, si olvida reforzar la parte del glúteo no está exento de que los glúteos se debiliten de manera progresiva.
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¿Quieres saber si tienes el síndrome del trasero muerto? Detectarlo es fácil, basta con hacer una prueba llamada Trendelenburg para averiguarlo. El test consiste en levantar una pierna, y si la pelvis se hunde en ese lado, eso apunta a que podría tratarse del síndrome del trasero muerto. Lo ideal para cualquier persona es no olvidarse de reforzar los glúteos y mantenerse despierto.