La fiesta Noruega que dura un mes está causando descontrol

Russ, la fiesta adolecente

En Noruega los adolescentes que están a punto de terminar la secundaria se preparan para Russefeiring, o mejor conocida como Russ, es una la fiesta que dura casi un mes y durante la cual los adolescentes pueden hacer de todo: tomar cuanta cervezas quieran, bailan hasta cansarse y pueden explorar ampliamente su sexualidad.

Está fiesta se extiende desde las playas a los bares, esto comienza a finales de abril y hasta la mitad de mayo, durante estos días los jóvenes son prácticamente dueños de todos los lugares recreativos. Hay premios para los que tienen sexo, se gastan cientos de dólares en bebidas, en pastillas para el dolor de cabeza y el cansancio y todo eso sin dejar de asistir a clases.

"Son adolescentes llenos de esteroides", dice un adulto para describir lo que sucede en estas tres semanas. "Es una locura incomparable", agrega otro, de acuerdo con lo publicado por un diario local.

La fiesta se caracteriza por los viajes desordenados de los jóvenes por las carreteras del país y por las playas llenas de borrachos. Para cumplir enteramente con el ritual de este evento, cada año 12 estudiantes tienen que emprender una serie de retos extraños, que van desde dormir en los árboles hasta pasar una noche en la casa de alguno de sus profesores sin que se dé cuenta.

Algo muy representativo de esta festividad son sus colores, por ejemplo los alumnos que estudiaron agricultura llevan indumentos verdes, aquellos que eligieron economía, azules; aunque la mayoría viste rojo, el tono nacional de Noruega. Además, la fiesta cuenta con autobuses diseñados a medida con interiores con sofás de cuero, láseres y cines privados.

El ambiente que se vive en Noruega es de tolerancia total porque dada la tradición que significa, los noruegos respetan el momento como una especie de rito patriótico. Sin embargo, en los últimos años las autoridades se han preocupado por la creciente violencia, son muchos los adolescentes y demasiado el alcohol que consumen. De hecho, se ha reportado que en diversas fiestas muchos jóvenes terminan heridos, enfermos o con infecciones sexuales, entre otros hechos lamentables como el incremento de adicciones.