¿Cómo reconocer a un foráneo en la CDMX?

¡Ya sabemos que no hay provincias! Pero, coloquialmente así se refieren a las personas que no viven en la CDMX

ASALTAN A YURIDIA EN LA CDMX A PLENA LUZ DEL DÍA

Y es que para los chilangos ya nada es sorpresa, ni le puedes contar nada nuevo, pues hay quienes viajan en el metro todas las mañanas, aunque no es tan malo, pues vas forjando tu carácter y aprendes a estar mucho más atento, justo por ello, es mucho más fácil reconocer cuando alguien viene de alguna provincia, y si aún no nos crees, aquí una lista de cosas que delatan a nuestros amigos de provincia.

APPS PARA NUESTRA SEGURIDAD

-Se quejan de lo caro que es todo

Y es que sí, en la Ciudad de México, hay dos tipos de taqueros: los buena onda que dan el pack de taquitos muy barato, o los que te ven con cara de provinciano y te los venden en 15 pesos cada uno… ¡Y ni se diga de ir de fiesta! Porque para alguien de provincia, echar una fiesta en los bares de la CDMX implica tener que comer arroz y frijolitos una semana.

-Creen que en todas partes los van a asaltar

Sí, la CDMX no se distingue por ser una de las más seguras en el país… pero eso no quiere decir que los delincuentes están ahí al acecho afuera de cualquier museo, metro o departamento. Pero parece que eso es algo que los de provincia todavía no comprenden, pues toda zona les parece Tepito y van cuidando sus cosas como esperando la experiencia de ser asaltados.

-Dicen cosas como¡Ay! Yo no podría manejar aquí

En muchos estados de provincia se acostumbra algo conocido como “uno a uno”, lo que significa que, sin necesidad de semáforos, los automovilistas comprenden cómo funciona todo y siguen el sistema… cosa que no suele pasar en la CDMX, donde las reglas de tránsito se reducen a “el que pase primero”, haciendo de esta ciudad una pista en la que solo los más hábiles pueden conducir.

-"Aquí todo lo meten a un bolillo, ¿verdad?"

Lo sentimos hermanos chilangos, pero hay una realidad que los perseguirá el resto de los días y es que, todo lo que quepa en un bolillo, siempre les parecerá un manjar. 

-Se quejan de la contaminación

Reconocerás a alguien de provincia cuando te señale lo sucio que se ve el cielo por tanta contaminación… ¿tienen ellos la culpa? Puntos para ellos, quienes suelen tener atmósferas más amenas a la salud humana.

-Les aterra el metro

Si algo va a delatar siempre a un provinciano, es su gran temor al metro. Que si la gente, que si te empujan, que si no alcanzas a entrar o peor, que no alcances a salir en tu estación de destino… Sí, problemas de provincianos en la CDMX.

-Se burlan de las quesadillas con queso

Y el debate seguirá, pero hay algo claro: para los de provincia, TODAS LAS QUESADILLAS LLEVAN QUESO.