Madden NFL 20, Reseña
La serie del título más famoso de fútbol americano ¿ya dio todo de si?
Cómo todos los años ha llegado una nueva entrega del título más famoso de fútbol americano. En esta ocasión hemos decidido analizarlo como un fan de la NFL y como un jugador casual del videojuego de EA Sports que busca encontrar en Madden NFL 20 una experiencia cercana al deporte.
Después de varias generaciones, las franquicias deportivas presentan un ciclo claro: pasar e impresionar, mejorar, soltar y continuar. La primera etapa es simple: el salto de generación trae mejoras gráficas que justifican la compra de una nueva consola, pero las características que se refinaron pasan a segundo plano. La siguiente se ve aún mejor y comienza a agregar características que mejoran la experiencia. Finalmente, cuando se acerca la siguiente generación, los programadores se enfocan en el siguiente ciclo y dejan al título actual para trabajar en lo futuro. Así se siente Madden NFL 20: como si todos los esfuerzos de entregas anteriores quedaran de lado para el nuevo y brillante modelo.
Los gráficos tienen una extraña mezcla de malo y bueno. Cuando vemos la acción desde lejos o en tomas fijas, las texturas y la resolución de los jugadores es impecable. Pero cuando nos acercamos a los jugadores y coaches, la animación facial y los detalles de cada rostro se ven como un franco retroceso. Parecen muñecos de cera tratando de imitar humanos. La animación también perdió la suavidad que había alcanzado en las ediciones 16 y 17, donde se sentía ese cambio generacional.
El soundtrack con música licenciada y los comentaristas son más de lo mismo. Eso sí, los golpes en el emparrillado tienen un punch extra que otras ediciones no habían logrado. Más de una vez me hicieron exclamar de dolor al dar o recibir una potente tacleada.
En cuanto a los modos de juego, puedo decir que esta edición es completamente ajena para los novatos. La cantidad de opciones pueden llevar a un jugador primerizo a perder el ímpetu por la marisma de menús que tendrá que navegar. Pero muchas opciones no necesariamente se traducen a buen contenido. Por ejemplo, el modo franquicia te tiene en el escritorio del head coach recibiendo correos, haciendo entrevistas y preparando jugadas y entrenamientos. Pero no logra sentirse con la fuerza de, por ejemplo, el modo historia que FIFA introdujo esta generación.
Sí, hay poderes de súper estrellas del deporte y habilidades X factor que ayudan individualmente a los jugadores. Pero no son tan tangibles en el juego y menos si no te quedan ganas de aprenderlas después de 2 toneladas de menús.
Los cambios positivos
* El juego es más balanceado y competitivo on line.
* Los comandos cambiaron de botones, antes los hacías con los gatillos y ahora con la cruz digital
* El factor X potencializa a los jugadores clave con un comando especial.
*La multi-cam
* En la ofensiva tienes el bloqueo 2 vs 1
Los cambios negativos
* Se mantiene el mismo playbook
* Los gráficos se sienten estancados
* El layout es el mismo
* Cuando mandas la jugada en los anteriores Madden los jugadores se alineaban de manera real del team back a la línea de golpeo, ahora mandas la jugada y ya aparecen ahí como por arte de magia
* No cambiaron las celebraciones
* No puedes seleccionar entre patear y recibir en el volado
* Hay muchos lesionados
* Inteligencia artificial es muy permisiva en los castigos
A pesar de que en los valores de producción nunca se escatima, Madden NFL 20 no puede evitar verse desangelado y cansado. La próxima generación está a la vuelta de la esquina y puede ser que EA Sports le esté metiendo toda la carne a ese asador. Sólo el más empedernido de los fans que necesitan los jugadores 100% actualizados, encontrará algo en esta versión.
Por: Rolando vera en Xbox One X y Vladimir Arteaga en PlayStation 4 Pro
