Jason Momoa y la cicatriz que lo hizo más rudo

Jason Momoa se hizo famoso por la cicatriz que tiene, le ayudó para interpretar a personajes entrañables como Khal Drogo y Aquaman pero de ¿dónde viene?

Hay muchos actores que tienen cicatrices distintivas que los hacen ver aún más misteriosos o guapos. Joaquin Phoenix tiene cicatriz en el labio, Tommy Flanagan en sus mejillas y pues Jason Momoa en su ceja.

¿Cuál es la historia detrás de esta herida que le ha valido un papel protagónico en una de las series más famosas de todos los tiempos? Bueno, te contamos que no se la hizo él solo.

El actor reveló en una ocasión que obligó a un amigo a golpearlo en la cara para ayudarlo con su audición para Conan. Sin embargo, es cierto que comenzó a conseguir más trabajo gracias a su cicatriz.

“Fue una locura”, dice Momoa sobre un incidente que provocó la cicatriz en su ceja. “Un tipo me rompió un vaso de cerveza en la cara. Me dieron un poco más de 140 puntadas en mi cara”

Nada bonito la forma en la que le quedó esa cicatriz. En 2008, Jason se peleó con un hombre llamado Dominic Bando en el Bird Café en Hollywood, que, de acuerdo con su historia, estaba formando parte de la iniciación de una pandilla. El actor a raíz de esa herida recibió cirugía reconstructiva en la cara y 140 puntadas.

Comenta también que la cicatriz le trajo buena suerte en el trabajo ya que lo ayudó a tener un look más rudo, que le ganó su papel en Game Of Thrones y Aquaman.