Cambiar de pareja cada cinco años podría ser la clave de la felicidad, según psicólogos

Cuando te sientes profundamente enamorada o enamorado de una persona todo dentro de ti fluye tan maravillosamente que crees que esa atracción y sentimientos que tienes podrían durar para toda la vida.

Sin embargo, con el paso del tiempo y como todo en la vida, las cosas cambian y te das cuenta de que por mucho afecto que le tengas a tu pareja, la intensidad con la que vivían su amor en un principio, poco a poco comienza a desvanecerse.

Las historias de amor relatadas en películas o libros e incluso la relaciones perfectas que se muestran en las redes sociales, han provocado que muchas veces se genere una concepción errónea del amor, pues “el amor por siempre” que presentan podría estar acompañado de actos de posesión.

Pero no te asustes, si tu eres de las personas que ya lleva más de cinco años con su pareja y consideras que las cosas siguen marchando bien a pesar de los altibajos, toma en cuenta que para que el amor y la comprensión perdure por más tiempo es necesario seguir trabajando en su relación, a través de la comunicación, la confianza y el espacio que les permita mantener su individualidad.

En la actualidad la forma de relacionarnos con otras personas ha cambiado, la tecnología y la inmediatez han provocado que todo lo que está alrededor de nuestras vidas se mueva rápido y sea inmediato, y ante estos fenómenos que se presentan, la psicología se ha dado a la tarea de estudiar las relaciones y su duración, llegando a la conclusión de que lo mejor es que cambies de pareja cada cinco años.

El psicólogo español, Rafael Santandreau en uno de sus estudios menciona que las relaciones que perduran se mantienen gracias a los celos y a la dependencia, factores peligrosos si no se controlan y llegan al extremo.

El experto dice que el secreto de la felicidad es que cambies de pareja cada 5 años o cuando haya necesidad, es decir, cuando te des cuenta de que tu relación ya no tiene futuro, cuando ya no te sientes bien con la otra persona o simplemente cuando quieres terminar.

La conclusión de Santandreau tiene una razón y es que los humanos no están programados para una relación que dure toda su vida.

Asimismo, menciona que en generaciones pasadas, el “amor eterno" duraba porque los hombres se comportaban como si las mujeres pertenecieran a ellos. En esos tiempos era muy complicado que una mujer pudiera divorciarse con éxito o decir abiertamente que ya no quería estar junto a su marido, por lo tanto, el hombre se sentía con el derecho de decidir por ella y pensar que su esposa no podría dejarlo nunca.

¿Qué te pareció la información? No olvides que antes de empezar una relación cuando acabas de terminar otra, debes procesar la ruptura y atravesar por un duelo para que te desintoxiques del pasado.