Muere Javier Bátiz, uno de los grandes pioneros del rock mexicano

Este 14 de diciembre se dio a conocer la lamentable noticia de que Javier Bátiz, uno de los pioneros del rock mexicano falleció a la edad de 80 años.

El anuncio lo dio a conocer su esposa Claudia Madrid través de las redes sociales: “Queridos amigos y familia. Para informarles que nuestro adorado u querido esposo Javier Bátiz trascendió el día de hoy. Su legado y su música quedan para la eternidad. Te amo, amor mío, vuela alto mi ángel”.

Claudia no mencionó los detalles acerca de su muerte, sin embargo, en una transmisión en vivo realizada en marzo de 2024, informó que tuvo una complicación de salud relacionada con una neumonía.

“Está un poco delicadito, pero estable, con neumonía y otras condiciones que salieron en los estudios (...) no nos damos cuenta hasta que lo vemos enojado o irritado, tiene un aguante muy extraño”.

Se fue un grande

El rock mexicano sufrió una de sus pérdidas más grandes, Javier Bátiz, el legendario guitarrista de Tijuana, falleció dejando un legado musical que trascendió generaciones y que marcará para siempre la historia de la música en español.

Su estilo único y su pasión por el rock no solo lo posicionaron como una figura clave, sino como una inspiración para muchos de los artistas más importantes del país.

Y es que desde sus inicios en la década de los 60 con Los Blue Caps, la banda que fue pionera en tocar rock en inglés en México, Javier Bátiz estuvo destinado a cambiar el destino del rock en español.

Su fusión de blues, rock y jazz con la guitarra eléctrica hizo que su estilo fuera inconfundible. Bátiz fue una de las primeras figuras mexicanas en mezclar los sonidos del rock internacional con la esencia y el alma mexicana, y a lo largo de su carrera, se rodeó de algunos de los artistas más influyentes de la música nacional.

Uno de sus colaboradores más emblemáticos fue Saúl Hernández de Caifanes. Bátiz fue una figura clave en la formación de la banda, y su influencia no solo fue musical, sino también como mentor. La guitarra de Bátiz dejó una marca en la sonoridad de Caifanes, especialmente en su primer disco, cuando la banda estaba buscando un sonido más crudo y auténtico, algo que Bátiz sabía hacer como pocos.

Otro de sus grandes aliados fue Alex Lora, líder de El Tri. Ambos compartieron escenario y grabaron juntos, uniendo dos generaciones del rock mexicano. La energía de Lora y la destreza de Bátiz en la guitarra crearon una química que resonó en el público, formando una amistad musical que perduró a lo largo de los años.

Una voz que se unió a grandes talentos

Además de sus colaboraciones con Caifanes y El Tri, Javier Bátiz también tuvo un vínculo estrecho con Miguel Ríos, uno de los cantantes más importantes del rock en español. Juntos crearon una mezcla perfecta de sonidos, y Ríos reconoció en Bátiz a un gran maestro, alguien que le mostró el camino para adentrarse en los matices del rock mexicano con más autenticidad.

El legado de Bátiz también se extendió hacia artistas de las nuevas generaciones. Molotov, una de las bandas más representativas del rock alternativo mexicano, siempre ha reconocido la influencia de Bátiz en su sonido. El guitarrista también fue cercano a Julieta Venegas, con quien colaboró en algunos de sus primeros trabajos, contribuyendo a la formación de un sonido más experimentado y diverso en su carrera.

Un adiós que trasciende al para siempre

Hoy, al decir adiós a Javier Bátiz, no solo recordamos a un músico que marcó el inicio del rock en México, sino a un hombre que forjó relaciones musicales que traspasaron generaciones. Su estilo, su autenticidad y su entrega no solo lo convirtieron en un ícono, sino también en el maestro de muchos que hoy siguen sus pasos.

Su legado, reforzado por las colaboraciones con gigantes como Saúl Hernández, Alex Lora, Miguel Ríos y otros, demuestra que su influencia seguirá viva en el ADN de la música mexicana. Bátiz no solo fue un guitarrista excepcional, sino un puente que unió a diferentes generaciones de músicos, siempre fiel a la esencia del rock y a la autenticidad que lo caracterizó.