Querida actriz pierde la batalla contra el cáncer a los 83 años

El mundo de las telenovelas está de luto. Este 19 de diciembre nos despedimos de Margalida Castro, una actriz icónica que marcó a generaciones con su talento y carisma.

A los 83 años, y tras enfrentar un cáncer descubierto recientemente, Margalida se despidió dejando un legado que seguirá vivo en el corazón de sus seguidores.

La triste noticia fue confirmada por su mánager y amiga cercana, Clau Serrato, quien compartió un emotivo mensaje en redes sociales: “Con profunda tristeza en el alma les comunico que mi grandiosa actriz y amiga Margalida Castro falleció, víctima de un cáncer que fue descubierto hace muy poco. Se me fue la ‘Monirri’ de mi alma… un baluarte de la cultura colombiana”.

Margalida no solo fue una actriz excepcional, sino también una mujer multifacética: escritora, arquitecta, flautista, religiosa y una voz constante en la promoción del arte y la fe. Serrato recordó cómo su vitalidad y su amor por la vida la llevaron a trabajar incansablemente, dejando una huella imborrable en cada proyecto que tocó.

Sus más grandes éxitos en la televisión

Con una carrera que abaró más de seis décadas, Margalida Castro participó en algunas de las producciones más emblemáticas de la televisión colombiana. En 1986, su talento fue reconocido con el prestigioso Premio India Catalina, gracias a su inolvidable interpretación de “Sussy Borda de Lavalle” en la telenovela Gallito Ramírez, donde compartió créditos con la icónica Margarita Rosa de Francisco.

Otros de sus trabajos destacados incluyen:

• La viuda de la mafia (2004)
• El Secretario (2011)
• Mujeres asesinas (2008-2010)

Además, Margalida también incursionó en producciones internacionales como Amantes del desierto y La Venganza, trabajando junto a figuras como Francisco Gattorno y Gaby Spanic. Su paso por Telemundo y su versatilidad como actriz consolidaron su lugar como una de las grandes de la industria.

Una vida de retos y superación

La vida de Margalida Castro no estuvo exenta de adversidades. De niña, un accidente le provocó un trauma craneal severo que requirió varias craneotomías, procedimientos que le dejaron marcas tanto físicas como emocionales. La experiencia derivó en insomnio crónico, llevándola a ser internada en hospitales psiquiátricos de Bogotá.

“La falta de sueño te vuelve loco… esos sitios eran terribles”, confesó en una entrevista, describiendo las precarias condiciones de los centros de salud mental en aquel entonces. Sin embargo, Margalida logró superar esas etapas oscuras y construir una carrera que hoy la inmortaliza.