Kim Kardashian llega a México para someterse a este exclusivo tratamiento, ¿de qué se trata?

En el universo de las celebridades, Kim Kardashian siempre ha sabido generar conversación, ya sea por sus negocios millonarios, sus elecciones de moda o sus incursiones en tratamientos de belleza y salud que desafían lo convencional. Esta vez, la estrella de 44 años no acaparó titulares por una alfombra roja, sino por un tratamiento médico con células madre que, según ella, le cambió la vida… y que tuvo que recibir en México debido a las restricciones vigentes en Estados Unidos.

La historia comenzó hace un par de años, cuando Kardashian sufrió una rotura de hombro mientras levantaba pesas. El dolor no cedía y las terapias tradicionales no daban el resultado que esperaba. Fue entonces cuando decidió probar con células madre, una opción que, asegura, le devolvió el rango completo de movimiento. “Mi hombro se ha sentido completamente normal desde entonces”, escribió en Instagram, donde compartió con sus casi 350 millones de seguidores los detalles de su experiencia.

Su publicación también reveló que recientemente volvió a cruzar la frontera para tratar un dolor crónico de espalda. “Ha transformado mi vida cuando pensé que mi cuerpo se estaba rompiendo. Por supuesto, todo el mundo es diferente… haz tu propia tarea y habla con profesionales médicos”, advirtió la empresaria, consciente del debate que rodea este tipo de procedimientos.

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Células madre: promesa y polémica

El potencial de las células madre ha fascinado a la ciencia durante décadas. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) señala que podrían servir para regenerar tejidos dañados, tratar quemaduras graves o incluso aportar soluciones para enfermedades como Alzheimer, Parkinson o diabetes tipo 1. Estas células tienen dos características que las hacen únicas: pueden renovarse indefinidamente y transformarse en otros tipos celulares a través de un proceso llamado diferenciación.

Sin embargo, el modo en que se obtienen es uno de los puntos más polémicos. Algunas provienen de embriones de apenas tres a cinco días, mientras que otras se extraen de tejidos adultos como la médula ósea o la grasa corporal, aunque en estos casos su capacidad de transformación es más limitada.

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En Estados Unidos, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) regula estrictamente los productos de medicina regenerativa. A día de hoy, solo están aprobadas las células madre hematopoyéticas, derivadas de la sangre del cordón umbilical, y exclusivamente para tratar trastornos que afectan la producción de sangre. Cualquier otro uso, como el que eligió Kardashian, requiere viajar a países donde la legislación es más flexible, como México.