¡La Atlántida está en el Caribe! Este museo bajo el mar te impactará con su mezcla de arte y naturaleza

A unos metros bajo la superficie turquesa del Caribe mexicano, un silencio distinto se apodera de los sentidos. No es vacío, sino un murmullo líquido que envuelve cada burbuja de aire. Allí, entre juegos de luz y sombra, emergen figuras humanas, autos cubiertos de coral y formas que parecen susurrar historias olvidadas: bienvenido al Museo Subacuático de Arte de Cancún (MUSA), una de las joyas más extraordinarias del mundo.

Este paraíso sumergido no es fruto del azar. Desde 2009, el MUSA ha transformado el lecho marino en una galería viviente, con más de 500 esculturas creadas en su mayoría por el artista británico Jason deCaires Taylor, así como por talentos mexicanos y extranjeros. Cada pieza está diseñada con concreto marino, el cual fomenta el crecimiento de corales, convirtiendo el arte en refugio para miles de peces y otras especies marinas. Así, lo que en la superficie es un museo, bajo el agua es un santuario.

Dónde está y cómo llegar

El MUSA se extiende en dos áreas principales: una entre Isla Mujeres y Cancún, y otra frente a la costa de Punta Nizuc. Para llegar, basta con tomar un tour desde la Zona Hotelera de Cancún o desde el centro de Isla Mujeres. No hay forma de visitarlo por cuenta propia, ya que forma parte del Parque Marino Nacional, lo que garantiza su cuidado y preservación.

El recorrido bajo el mar

Existen distintas maneras de explorar este mundo sumergido:

• Snorkel, ideal para quienes prefieren flotar en la superficie pero no perder detalle.
• Buceo con tanque, para acercarse a las esculturas cara a cara.
• Tours en barco con fondo de cristal, perfectos para familias o quienes no desean mojarse.

El paseo no solo ofrece arte, sino encuentros inesperados con tortugas marinas, mantarrayas y cardúmenes multicolor. La sensación de estar en una “Atlántida” contemporánea es difícil de describir… y casi imposible de olvidar.

Datos curiosos que debes conocer

• El MUSA no es solo una atracción turística: es un proyecto ecológico que ayuda a desviar a los visitantes de los arrecifes naturales, dándoles tiempo para regenerarse.
• Las esculturas están colocadas a diferentes profundidades, lo que hace que la luz del sol juegue con sus formas de manera única a cada hora del día.
• Algunas piezas, como The Silent Evolution, agrupan decenas de figuras humanas, creando la ilusión de una multitud congelada en el tiempo.

Un viaje que transforma

Visitar el MUSA Cancún no es solo una actividad turística; es una experiencia que invita a reflexionar sobre nuestra relación con el mar y la capacidad del arte para sanar ecosistemas. Al emerger a la superficie, uno regresa distinto: con la certeza de que, bajo esas aguas, existe un mundo donde la creatividad humana y la naturaleza trabajan en armonía.