¿Puedo negarme a hacer funciones en el trabajo que no están en mi contrato?
Conoce qué dice la ley si tu jefe te pide tareas fuera de lo pactado en tu contrato y aprende a poner límites sin afectar tu trabajo
Aunque no lo creas, puedes negarte a hacer tareas que no van con las funciones que indica tu contrato, / RapidEye
En El Brunch siempre nos gusta poner sobre la mesa esos temas que muchas veces no pensamos hasta que nos pasan o le pasa a alguien cercano a nosotros. En el consultorio laboral con Mario Rebolledo, abogado especialista en derecho laboral, nos ayudó a resolver algunas dudas, entre ellas una de las más comunes en el mundo godín: ¿estoy obligado a realizar funciones que no aparecen en mi contrato?
¿Me puedo negar a hacer tareas extra en el trabajo?
La respuesta es clara: sí puedes negarte. De acuerdo con la Ley Federal del Trabajo, un empleado solo tiene la obligación de realizar las funciones que fueron establecidas en su contrato laboral. Si tu jefe quiere que hagas otras tareas que no aparecen ahí, debe modificarse el contrato o llegar a un acuerdo contigo, para mediar la las tareas que realizarás y que se iguale a la carga de trabajo que ya tenías o posiblemente ajustar tu remuneración.
¿Qué pasa si acepto “de buena onda”?
Mario recalcó que aceptar actividades fuera de lo pactado puede parecer algo menor, pero con el tiempo puede convertirse en una sobrecarga laboral. Si esas funciones extras afectan tu tiempo, tu salud o incluso tu salario, tienes todo el derecho de hablarlo con tu empleador e incluso acudir a instancias legales.
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Puedes llegar a un acuerdo con base a tu salario, la carga de trabajo y las nuevas funciones que te ofrecen desempeñar. / Robert Decelis
Puedes llegar a un acuerdo con base a tu salario, la carga de trabajo y las nuevas funciones que te ofrecen desempeñar. / Robert Decelis
El poder de conocer tu contrato laboral
Muchas veces damos por hecho nuestras obligaciones sin leer a fondo el contrato. La recomendación es tenerlo siempre a la mano, porque ahí están los límites de tus responsabilidades. Conocerlo te da herramientas para decir “sí” cuando corresponde y “no” cuando se rebasa lo que firmaste.
Nadie puede obligarte a asumir tareas que no están en tu contrato, a menos que exista un acuerdo previo y formal.
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Lo más valioso de esta plática es que nos recuerda la importancia de conocer nuestros derechos laborales, pero también de entender que hay una zona gris entre lo legal y lo conveniente.
Porque aunque parezca difícil, sí podemos decirle que NO al jefe cuando pide funciones extra o que no nos corresponden, pero al final todo depende de cómo manejemos la situación, qué tan claros sean los contratos y hasta qué límites establezcamos como trabajadores.
