Octubre en CDMX: 12 experiencias de terror para vivir la ciudad como nunca

Si buscas planes diferentes en la Ciudad de México este octubre, existen lugares y experiencias donde el miedo se convierte en espectáculo. Desde casas embrujadas en colonias icónicas hasta paseos nocturnos en trajinera, aquí te presentamos un recorrido por 12 actividades que mezclan historia, leyenda y sustos garantizados.

La isla de las muñecas: entre lo macabro y lo surrealista

En los canales de Xochimilco descansa uno de los rincones más perturbadores de la capital: una isla cubierta de muñecas colgadas en árboles y paredes. El lugar nació de la obsesión de un hombre que recogía muñecas viejas para “ahuyentar espíritus”. Hoy, visitantes de todo el mundo llegan atraídos por la atmósfera densa y casi cinematográfica que envuelve este sitio.

El callejón del aguacate: susurros en Coyoacán

Entre calles empedradas y casonas coloniales, Coyoacán esconde un callejón que ha sido escenario de múltiples leyendas. Vecinos aseguran haber visto sombras y escuchado lamentos en las madrugadas. Pasear por ahí de noche es enfrentarse a un silencio inquietante que parece cargar siglos de historias no contadas.

La posada del Sol: la ruina que vigila

En medio de la colonia Doctores se levanta este edificio abandonado que alguna vez prometió lujo y esplendor. Hoy, con paredes grafiteadas y pasillos oscuros, se le considera un punto de encuentros paranormales. La mezcla de ruina urbana y mito lo convierte en un destino irresistible para los curiosos del terror.

El panteón de Dolores: ciudad de los muertos

El cementerio más grande de México guarda miles de tumbas que narran la historia de la capital a través de epitafios y esculturas. Caminar entre sus pasillos durante la temporada de Día de Muertos es adentrarse en una memoria viva, donde lo sagrado y lo macabro se funden en cada esquina.

La casa de las brujas: secretos en la Roma

En pleno corazón de la Roma se encuentra un edificio triangular que parece sacado de un cuento gótico. Su silueta puntiaguda le valió el apodo de “la casa de las brujas”, y las historias sobre voces y apariciones han alimentado su leyenda. Mirar sus ventanas iluminadas al anochecer es suficiente para sentir un escalofrío.

El ex convento del Desierto de los Leones: rezos que no cesan

Rodeado de bosque y neblina, este convento del siglo XVII guarda un aire solemne que se intensifica al caer la noche. Quienes lo visitan aseguran escuchar cánticos y pasos en celdas vacías. Su encanto radica en el contraste: naturaleza majestuosa y claustros que parecen atrapados en otro tiempo.

La casa negra de la Roma: la maldición del abandono

Un inmueble que fue hogar y luego hospital se mantiene vacío desde hace décadas. El deterioro de sus muros y la oscuridad de su interior han dado pie a rumores sobre energías densas. Es uno de esos lugares donde basta asomarse a la puerta para sentir el peso de lo invisible.

La casa de la tía Toña: leyenda viva en Chapultepec

En el bosque más famoso de la capital, un camino conduce a una casona que protagoniza una de las leyendas más populares. La historia cuenta que una mujer adinerada recogía niños de la calle para luego deshacerse de ellos. Aunque el relato nunca se comprobó, la casa sigue siendo destino de valientes que buscan “escuchar” a la tía Toña en la oscuridad.

Atlantis: parque acuático en ruinas

En la Magdalena Mixhuca yace un antiguo parque acuático que en los 90 fue símbolo de diversión. Hoy, en abandono, sus toboganes oxidados y albercas vacías parecen escenario de una película apocalíptica. Explorar sus restos es un viaje a un pasado congelado en decadencia.

Coyoacán y su tour actuado: teatro en las calles

Para quienes prefieren la experiencia guiada, existe un recorrido nocturno por Coyoacán donde actores recrean leyendas locales. Entre faroles y plazas, el público se convierte en testigo de apariciones y relatos que cobran vida en tiempo real. Una mezcla de historia, espectáculo y tradición.

Six Flags y su Festival del Terror: miedo en formato blockbuster

El parque de diversiones se transforma cada octubre en un escenario de horror con casas embrujadas, pasajes temáticos y actores que acechan en cada esquina. Es la experiencia más mainstream del miedo en la ciudad, ideal para quienes buscan sustos coreografiados y un despliegue visual digno de película.

El show de la Llorona: el mito en trajinera

En Xochimilco, cada noche de temporada se levanta un espectáculo sobre la leyenda más conocida de México. Entre trajineras, música en vivo y luces sobre el agua, la figura de la mujer que llora por sus hijos se convierte en protagonista de un relato que mezcla tradición con puesta en escena.

Noctambulante: cine y campamento

Más que un festival, es una experiencia inmersiva: acampar en medio del bosque mientras se proyectan películas de terror. El silencio de la madrugada y los ruidos del entorno convierten cualquier escena en un susto extra. Es la opción perfecta para quienes buscan una mezcla de naturaleza y horror cinematográfico.

Una ciudad que respira miedo en octubre

La Ciudad de México no necesita disfraces para dar miedo: lo hace con sus calles, sus leyendas y sus ruinas. Octubre es solo la excusa perfecta para recorrer estos espacios donde lo paranormal, lo teatral y lo histórico se funden en experiencias que van de lo íntimo a lo espectacular.