Lupillo Rivera respondería a Belinda con indirecta tras la demanda que le interpuso
El cantante encendió nuevamente la polémica al publicar un mensaje en redes sociales que muchos interpretaron como una indirecta hacia la intérprete de Cactus

¿Lupillo manda indirecta a Belinda? / Getty images
El cantante Lupillo Rivera reaccionó a la reciente denuncia legal interpuesta por Belinda por presunta violencia digital y mediática. A través de un video publicado en sus redes sociales, el artista compartió un fragmento de una canción que parece contener un mensaje dirigido a su expareja: “Ya sé quiénes son esos que andan hablando, son los mismos que me pidieron prestado”.
La respuesta que desató la controversia
La publicación del intérprete no tardó en volverse viral. En el clip, Lupillo aparece con la canción Los que hablan de mí de fondo, enfatizando una parte que, según los usuarios, tenía una clara referencia hacia la intérprete de Cactus. Las líneas elegidas, “me pidieron prestado” y “a mis espaldas la lengua soltaron”, fueron interpretadas como una indirecta a la cantante, justo después de que esta presentara una denuncia formal ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, acusándolo de divulgar información íntima y personal sin su consentimiento.
La respuesta del artista generó una ola de críticas. En los comentarios, cientos de usuarios lo acusaron de burlarse de la situación legal y de intentar desacreditar a la intérprete mexicana. Algunos calificaron su actitud como “obsesiva” y “poco caballerosa”, mientras otros recordaron viejas polémicas del cantante con un tono de indignación.
El libro que encendió la mecha
Todo comenzó con la publicación del libro Tragos Amargos, una obra en la que el cantante mezcla recuerdos personales con anécdotas amorosas, entre ellas su relación con la protagonista de Bienvenidos a Edén.Durante las entrevistas promocionales, el intérprete de regional mexicano no dudó en hablar sobre su romance con la artista, asegurando que estuvieron juntos durante siete meses y que la ruptura se debió a una supuesta infidelidad de ella.
Entre sus declaraciones, también aseguró que la cantante fue quien dio el primer paso para tener intimidad, y que incluso llegó a expresarle su deseo de formar una familia y tener gemelas. Estas revelaciones, consideradas por muchos como una violación a su privacidad, fueron el detonante de la demanda por violencia digital y mediática presentada por el despacho Maceo, Torres & Asociados, en representación de Belinda.
Una demanda por violencia digital y mediática
De acuerdo con el comunicado del equipo legal de la cantante, la denuncia se basa en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en la que se establece que la exposición no consentida de información privada constituye una forma de agresión mediática.La intérprete, además, solicitó medidas de protección ante el acoso y la difusión de su vida íntima, intentando poner un alto a la narrativa que el artista ha sostenido públicamente desde hace semanas.
Aunque Rivera no ha hecho declaraciones directas sobre la denuncia, su publicación más reciente ha sido suficiente para mantener encendida la polémica y dividir las opiniones en redes sociales.
De las memorias al enfrentamiento público
El conflicto entre ambos artistas ha evolucionado de un pasado romántico a un enfrentamiento legal. Lo que alguna vez fue un vínculo afectivo se ha convertido en un tema de interés mediático, donde cada palabra parece alimentar una historia de reproches, declaraciones y demandas.
Para muchos, la situación marca un precedente sobre cómo la exposición pública de relaciones pasadas puede cruzar la línea de la intimidad y transformarse en violencia simbólica.
¿Cómo comenzó el problema entre Lupillo y Belinda?
El origen de esta controversia se remonta al momento en que el cantante empezó a dar entrevistas sobre Tragos Amargos, el libro donde relató episodios personales de su vida y su relación con Belinda, asegurando haber descubierto una infidelidad y revelando detalles de su intimidad.Las declaraciones provocaron una reacción inmediata: Belinda decidió llevar el caso ante las autoridades, alegando que sus palabras constituían violencia digital y mediática.
Desde entonces, la disputa ha crecido fuera del terreno sentimental y se ha convertido en un caso que expone el límite entre la libertad de expresión y el respeto a la privacidad.
Mi opinión sobre este tema

Viviana Hernández Bran
Licenciada en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón, UNAM. Creadora de contenido escrito y digital...


