Lo inevitable de nosotros: los amores que no fueron, pero nunca se van

Hay amores que no terminan: se quedan suspendidos en el tiempo, como ecos que se niegan a desvanecerse. De eso trata el libro Lo inevitable de nosotros, la novela de Michelle Ortiz, una autora mexicana que encontró en la escritura un modo de entender sus propias cicatrices.Su historia no es solo un relato de amor, sino una conversación entre la memoria, los vínculos rotos y los “casi algo” que marcaron una generación acostumbrada a querer con prisa, pero recordar despacio.

El amor que no se consuma, pero deja huella

En el universo literario de Ortiz, un encuentro breve puede ser tan profundo como una historia de años. Bea, la protagonista, vive uno de esos vínculos fugaces que se instalan en el alma y, aunque terminan, dejan la sensación de algo inconcluso.Entre ella y Pablo, el amor no llega a completarse: se interrumpe, se suspende, pero jamás desaparece.“Quise hablar del amor breve que te transforma, explica la autora, de cómo a veces una historia corta puede marcarte más que una relación que dura toda la vida”.

Esa sensación de lo inacabado, de lo que no se dice o no se vive del todo, atraviesa toda la novela. Los lectores se reconocen en esa nostalgia que aparece cuando piensas en esa persona con la que casi fue, pero no. Los reencuentros, la distancia, el deseo de una segunda oportunidad: Lo inevitable de nosotros se sumerge en la emoción que queda cuando el amor no muere, pero tampoco regresa.

La herida invisible: infidelidad, familia y merecimiento

Más allá del romance, la novela también explora cómo los patrones familiares moldean la forma en que amamos. Bea crece con la herida de haber presenciado una infidelidad dentro de su familia, un acontecimiento que, sin entenderlo del todo, deja una marca silenciosa en su manera de vincularse.Ese trauma la lleva a creer que no merece ser amada, que el amor es una suerte de castigo o una promesa destinada a romperse.

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Michelle Ortiz confiesa que parte de esa historia proviene de su propia experiencia:

“Fue un tratamiento para mi herida, dice. Escribir esta historia fue una forma de comprender de dónde viene ese miedo al amor, cómo las experiencias familiares pueden definir lo que creemos merecer”.

La novela convierte ese dolor en espejo: invita al lector a mirar sus propias raíces, a reconocer que muchas veces el miedo a ser amados no nace de una relación, sino del ejemplo que vimos cuando éramos niños.

Entre el realismo mágico y la memoria

Aunque Lo inevitable de nosotros es un romance contemporáneo, también está atravesado por una atmósfera de realismo mágico. En la historia, la casona familiar se convierte en un personaje más: un espacio donde los ecos de los ancestros aún resuenan, donde los muertos acompañan y los recuerdos parecen tener vida propia.

“No se trata de fantasmas, aclara Ortiz, sino de esa sensibilidad femenina, casi intuitiva, que muchas mujeres tenemos: saber que algo va a pasar antes de que ocurra. Quise plasmar ese sexto sentido como una herencia espiritual, una forma de conexión entre generaciones”.

La familia Domínguez, protagonista de la novela, vive rodeada de esa mezcla entre lo real y lo intangible, una metáfora de cómo las dinámicas ancestrales continúan repitiéndose, incluso cuando intentamos escapar de ellas.

El mensaje: no temerle a la intensidad del corazón

En tiempos donde las relaciones parecen fugaces y los sentimientos se consumen en 24 horas, Michelle Ortiz propone un mensaje contracorriente:

“No hay que tenerle miedo a nuestros corazones, dice. Que no nos torture cuánto quisimos, porque eso habla de la capacidad que tenemos para amar”.

Su obra recuerda que amar intensamente no es una debilidad, sino una forma de humanidad. Que mostrarse vulnerable no significa perder, y que tener una red de apoyo —familia, amistades, comunidad, es lo que nos sostiene cuando el amor no alcanza.

Una historia sobre lo que queda cuando el amor se va

Esta novela no busca respuestas absolutas. Más bien, plantea una pregunta que muchos evitamos: ¿qué pasa con los amores que no tuvieron final feliz, pero siguen viviendo dentro de nosotros?Bea aprende que la vida no siempre ofrece cierres perfectos, y que a veces la verdadera redención está en aceptar que no todo lo que duele está perdido.

Lo inevitable de nosotros, de Michelle Ortiz, ya está disponible en librerías.Una historia sobre los amores truncos, los patrones familiares, y la belleza que existe incluso en aquello que no llegó a ser… pero que sigue siendo inevitable.

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