¿Qué es el vamping y por qué está afectando de forma inimaginable tu salud?
Revisar el celular antes de dormir se ha vuelto un ritual moderno. Pero detrás de ese gesto cotidiano se esconde un fenómeno silencioso que deteriora el descanso, la salud mental y el rendimiento diario

Vamping / D-Keine
El vamping no ocurre en castillos oscuros ni con colmillos afilados, sino entre notificaciones y pantallas encendidas. Se llama así, por “vampiro”, porque roba lo mismo que ellos: la noche.Es el hábito de permanecer despierto más de lo necesario, navegando entre redes sociales, series o mensajes, cuando el cuerpo ya pide descanso.Y aunque parezca inofensivo, esta costumbre cotidiana está erosionando la calidad del sueño y, con ella, la capacidad de concentración, el estado de ánimo y el equilibrio emocional de millones de personas.

Vamping / Yiu Yu Hoi

Vamping / Yiu Yu Hoi
¿Por qué el vamping es tan peligroso?
Detrás de ese impulso de revisar “una última vez” el celular hay un circuito químico muy preciso: la luz azul que emiten los dispositivos engaña al cerebro, lo convence de que aún es de día y retrasa la liberación de melatonina, la hormona del sueño.El resultado es un descanso fragmentado, superficial y, con el tiempo, una fatiga acumulada que se traduce en irritabilidad, ansiedad y pérdida de productividad.
Los especialistas lo comparan con un “microjet lag” diario: el cuerpo vive en desfase, atrapado entre el reloj biológico y el digital.
Consecuencias invisibles del vamping
1. Sueño superficial, mente agotada
Dormir con el teléfono cerca genera interrupciones constantes. Cada vibración o notificación reactiva el sistema nervioso, impidiendo que el cerebro entre en las fases profundas del descanso.
2. Cansancio emocional y ansiedad digital
La exposición prolongada a contenidos estimulantes, noticias, redes, videos, mantiene la mente en alerta. Esto produce una sensación de saturación emocional que se confunde con estrés o insomnio.
3. Productividad y memoria en caída libre
Quienes duermen menos de seis horas por estar frente a una pantalla suelen mostrar un descenso en la atención y la memoria a corto plazo. Las tareas cotidianas se vuelven más lentas, los errores aumentan y la creatividad se diluye.
4. Niños y adolescentes, los más vulnerables
En los más jóvenes, el vamping no solo altera el descanso, sino también el desarrollo neurológico. El sueño profundo, crucial en esa etapa, se sustituye por estímulos luminosos que sobrecargan el sistema nervioso.
Cómo liberarse del vamping sin renunciar al mundo digital
Dormir bien no implica desconectarse del todo, sino poner límites inteligentes. Estas estrategias pueden ayudar:
1. Fijar una “hora de cierre digital”
Al menos 45 minutos antes de dormir, apaga o aleja el teléfono. Ese margen permite que el cuerpo transite del estado de alerta al descanso.
2. Crea un ritual nocturno sin pantallas
Leer unas páginas, escuchar música suave o practicar respiración consciente son señales que el cerebro interpreta como “hora de dormir”.
3. Saca el celular del dormitorio
Elimina la tentación. Si usas el teléfono como despertador, sustitúyelo por uno analógico. La distancia física ayuda a romper el ciclo mental.
4. Predica con el ejemplo
Si hay niños o adolescentes en casa, establecer un horario familiar sin pantallas antes de dormir puede marcar una diferencia profunda en sus hábitos de descanso.
Dormir como acto de rebeldía
En un mundo que nunca apaga la pantalla, dormir bien se ha convertido en un acto de resistencia.El vamping no solo nos roba horas de sueño: nos arrebata el silencio, la pausa y la intimidad con nosotros mismos.Desconectarse, aunque sea por unas horas, es recuperar la noche como un territorio propio; volver a habitar el cuerpo, cerrar los ojos y dejar que la mente, por fin, descanse de tanto brillo.

Viviana Hernández Bran
Licenciada en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón, UNAM. Creadora de contenido escrito y digital...


