Así fue como la madre de Hilary Duff habría utilizado métodos cuestionados para que su hija llegara la cima de la fama
La historia de Hilary Duff guarda un giro inesperado: nuevas revelaciones apuntan a que su ascenso en Disney estuvo marcado por decisiones controvertidas de su madre, señalada por prácticas tóxicas que afectaron a otros actores
Hilary Duff / Michael Kovac
En los últimos días han resurgido testimonios que señalan a Susan Colleen Duff, madre de Hilary Duff, como una figura determinante, y polémica, en el ascenso meteórico de la actriz. De acuerdo con nuevas versiones, su intervención habría perjudicado a varios colegas de su hija durante los años dorados de Disney, un relato que cambia por completo la percepción romántica de la estrella juvenil.
Hablar de Hilary es abrir el álbum pop de toda una generación. Su nombre evoca la frescura de Lizzie McGuire, la fantasía moderna de La nueva Cenicienta y el caos entrañable de Más barato por docena. A esto se suman himnos adolescentes como Come Clean y So Yesterday, banda sonora de miles de habitaciones con pósters fluorescentes.
Pero esa imagen inocente y eléctrica contrasta con una narrativa menos amable: la de una madre convertida en estratega incansable, capaz de mover hilos entre pasillos de estudio, despachos de productores y sets de grabación para asegurar el lugar privilegiado de su hija.
La figura de Susan Colleen Duff: una madre, una representante y una sombra persistente
Durante años, Susan fue vista como una madre entregada al talento de sus hijas. Sin embargo, con el tiempo comenzaron a abrirse grietas en esa fachada: anécdotas que antes parecían simples rumores ahora toman forma de patrones. Actores, asistentes y miembros de producción describen comportamientos que, bajo los estándares actuales, encajarían en dinámicas de control, manipulación o presión excesiva.
La versión predominante es que ella veía enemigos potenciales en cada rostro joven con aspiraciones. Y, cuando lo consideraba necesario, intervenía.
Lo que ocurrió con Lalaine en Lizzie McGuire
Uno de los episodios más comentados tiene como protagonista a Lalaine, la actriz que interpretó a Miranda Sánchez, la inseparable mejor amiga de Lizzie McGuire. Su carisma y habilidad vocal llamaron la atención de los productores al grado de otorgarle interpretaciones musicales dentro de la serie.
Aquello que pudo haber sido una expansión natural del personaje terminó, según estas versiones, convirtiéndose en el detonante de un conflicto. La idea de que otra joven actriz destacara junto a Hilary, afirman varias voces, habría despertado el enojo de Susan.
Lalaine Lizzie McGuire / internet
La desaparición silenciosa de un personaje querido
No tardó mucho en ocurrir lo impensado: la salida repentina de Lalaine del proyecto. La versión que hoy circula señala que no fue una decisión creativa genuina, sino el resultado de presiones ejercidas por la madre de Hilary, quien habría considerado a la actriz un riesgo para el protagonismo de su hija.
El público lo notó: Miranda desapareció sin explicaciones consistentes. Solo ahora, dos décadas después, comienzan a aclararse los motivos.
Hollywood adolescente: amistades rotas, papeles perdidos y decisiones incómodas
Frankie Muniz, protagonista de Malcolm el de en medio, mantuvo durante años una amistad cercana con Hilary. Una relación que, según su propio relato, se vio entorpecida por la presencia constante e invasiva de Susan.
El actor ha contado que, durante una conversación casual en un camerino, mencionó que participaría en una película de espías. Lo que parecía una charla inocente se habría convertido en información estratégica para Susan, quien, según el testimonio, insistió hasta obtener más detalles.
Días más tarde, se enteró de que el papel femenino que originalmente se había asignado a otra actriz terminó en manos de Hilary.
No solo se trató de un casting. Para algunos dentro de la industria, fue el ejemplo más evidente de cómo la intervención de Susan alteró trayectorias ajenas. El rol que perdió la actriz original habría marcado un punto de quiebre para varios jóvenes intérpretes que competían por oportunidades en un Hollywood dominado por presiones adultas.
Frankie muniz y Hilary Duff / KMazur
Una reflexión para la era actual: ¿cuánto cuestan realmente las carreras infantiles?
Los testimonios que hoy resurgen no solo reescriben la historia de Hilary, sino que abren una conversación más amplia sobre la industria del entretenimiento infantil en los 2000. Una década marcada por padres que navegaban entre la protección y el exceso de control, donde la línea entre apoyo y ambición desbordada era frecuentemente difusa.
Si estas versiones resultan ciertas, su éxito no pierde mérito; simplemente adquiere matices: fue una estrella extraordinaria, sí, pero cuyo camino estuvo acompañado por decisiones adultas que hoy serían cuestionadas bajo estándares éticos más sólidos.
Con información de Cultura Colectiva.
Viviana Hernández Bran
Licenciada en Comunicación y Periodismo por la...Licenciada en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón, UNAM. Creadora de contenido escrito y digital en Los40 México, El Eco de LOS40 y W Radio. Activa en Radiópolis desde 2021.