¿Por qué los seres humanos le temen a las cucarachas? El episodio de Rosalía que reabrió un miedo ancestral
La reacción viral de Rosalía ante una cucaracha en Río de Janeiro reaviva una vieja pregunta: ¿qué esconden estos insectos que nos provoca tanto pavor?

Rosalía-miedo a las cucarachas / getty images
El miedo a las cucarachas es una de las fobias más comunes en el mundo: un temor visceral que mezcla repulsión, sobresalto y ansiedad. Aunque se manifiesta de forma distinta en cada persona, su origen se vincula con factores evolutivos, culturales y psicológicos. La reciente reacción de Rosalía ante una cucaracha volvió a poner este tema bajo los reflectores y encendió la conversación global.


Rosalía y el “bicho” que interrumpió una entrevista: un momento humano en plena promoción
La escena duró apenas unos segundos, pero fue suficiente para incendiar Internet.Durante una entrevista en Río de Janeiro, con el Cristo Redentor vigilando desde la distancia, la cantante estaba respondiendo una pregunta cuando su mirada cayó al suelo. Algo se movía entre las baldosas: una cucaracha, minúscula pero lo bastante atrevida como para cruzar el encuadre.
La artista retrocedió de inmediato, levantó un pie como quien esquiva una emboscada y exclamó un “¡un bicho!” que se convirtió en instantáneo material viral. El gesto, espontáneo y casi infantil, arrancó carcajadas a la entrevistadora mientras Rosalía se escabullía unos metros atrás, repitiendo entre risas nerviosas: “¡No, no, qué miedo!”.
La escena tenía algo profundamente humano: una superestrella huyendo, no del ruido, no de un paparazzi, sino de un insecto cotidiano que cualquiera podría encontrar en su terraza o baño. Después de recomponerse, regresó con una disculpa cómplice: “Perdón, pero me dan mucho miedo”.
El clip recorrió plataformas, países y lenguas, confirmando un hecho indiscutible: incluso en la era de las celebridades intocables, seguimos siendo vulnerables a lo más elemental.
Y esa vulnerabilidad nos conecta.
De la risa al análisis: ¿por qué un insecto tan pequeño nos despierta un miedo tan grande?
La pregunta que detonó el video, y que millones de usuarios se hicieron después, no es nueva: ¿Por qué sentimos ese sobresalto casi automático al ver una cucaracha?
Un miedo heredado de nuestros ancestros. Aunque parezca exagerado, existe una raíz evolutiva.
Las cucarachas, con su movimiento impredecible, su velocidad y la capacidad de aparecer donde menos se espera, activan respuestas primitivas. Nuestro cerebro interpreta su desplazamiento rápido como una posible amenaza, un eco remoto de los tiempos en que detectar a tiempo a un animal rastrero podía significar sobrevivir.
La repulsión también tiene un origen biológico: a lo largo de la historia, estos insectos se han asociado con ambientes insalubres, riesgo de enfermedades y alimentos contaminados. Nuestro cuerpo, en automático, prefiere alejarse.
El factor sorpresa: esa coreografía caótica que descoloca a cualquiera
Una característica clave del miedo a las cucarachas es que rara vez se anuncian.No graznan, no zumban, no hacen antesala. Simplemente aparecen, irrumpen, se deslizan con agilidad sospechosa. Ese zigzag caótico despierta un reflejo de sobresalto, incluso en personas poco sugestionables.
Es la intrusión lo que asusta: entran en nuestro espacio sin pedir permiso.
El peso cultural del “insecto prohibido”
El cine, los cuentos, la televisión y las historias domésticas han moldeado una imagen casi demoníaca de las cucarachas. Se narran como plagas invencibles, criaturas inmortales, invasoras sin escrúpulos. La cultura ha reforzado un rechazo que ya venía inscrito en nuestra biología.
En muchos hogares latinoamericanos, por ejemplo, una cucaracha no es un insecto: es una visita indeseada que activa toda una estrategia operativa familiar.

Viviana Hernández Bran
Licenciada en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón, UNAM. Creadora de contenido escrito y digital...


