Exhiben a familia “poniendo cabellos" en la comida para no pagar la cuenta
Las cámaras de seguridad captaron el momento exacto en que la familia llevaba a cabo su plan de engaño
¿Qué es lo más desagradable que puede pasar cuando estas comiendo? Que aparezca un animal o cabello en la comida pero muchas veces son los comensales quienes deciden “plantar” ciertos objetos con tal de no pagar, como una familia en la Ciudad de México que decidió llevar a cabo este plan engañoso al poner cabellos en sus platillos.
El acto fue captado por las cámaras de seguridad del lugar, y posteriormente fueron compartidas en las redes sociales por una de las trabajadoras del lugar, con el objetivo de evidenciar el modus operandi de esta familia.
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En el vídeo narrado por una de las meseras se observa como los cuatro integrantes de la familia se encuentran comiendo como cualquier día, sin embargo llamó la atención como los padres comienzan a voltear hacia todos lados. Minutos después se observa como la mujer entregó a los demás miembros algunos cabellos que quito de su cabeza.
Según la trabajadora del establecimiento, esta era la segunda ocasión en que la familia se quejaba por tener “cabello en la comida”, por lo que decidieron mirar las cámaras de seguridad para observar lo que ocurría: “Hace un mes, ellos vieron a comer y les pasó un incidente. Que curiosidad que hoy les pasó exactamente lo mismo. La misma familia, exactamente lo mismo”.
En la grabación se escucha a la trabajadora indicando que ella pagó con sus propinas los platillos de los comensales, aparte de recibir un mal trato por parte de los clientes, quienes la agredieron verbalmente y acusaron al restaurante de ser unos “puercos”.
“El señor me empezó a gritar, me empezó a decir que éramos unos puercos, que si no sabíamos hacer nuestras cosas. (...) No es justo que nos quieran hacer este tipo de cosas nada más porque quieren una comida gratis. Si no tienen dinero, no vengan a comer y ya”, expresó la mesera.
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Al final, la mesera hizo hincapié en lo horrible que es que realicen estás prácticas y lamentó que los padres le inculcaran esa clase de valores a sus hijos: “Que poca de esa gente y que malos ejemplos para los niños, ya no hay buena cultura, decencia y honestidad con personas como estas”, finalizó la trabajadora.