Foo Fighters rinde emotivo tributo a Taylor Hawkins
El hijo del fallecido baterista subió al escenario para tocar la batería junto junto a la banda
A finales de marzo, la noticia del fallecimiento de Taylor Hawkins, baterista de Foo Fighters conmocionó a la industria musical mundial y a los fans, la banda ha decidido despedirse del baterista con un concierto homenaje lleno de estrellas.
En una noche cargada de emociones en el estadio de Wembley, los miembros supervivientes de la banda subieron al escenario en Londres junto a Liam Gallagher en "Rock 'n' Roll Star" y "Live Forever", dando inicio a un impresionante espectáculo de seis horas que contó con un amplio elenco de invitados especiales.
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El líder de los Foo Fighters, Dave Grohl, interpretó éxitos como "Times Like These", "Best Of You" y "Everlong", mientras estrellas como Paul McCartney, Travis Barker y los miembros de Queen Brian May y Roger Taylor también subieron al escenario del estadio de Wembley.
Grohl luchó contra las lágrimas y tuvo que recomponerse cuando tomó el micrófono para cantar la primera canción de Foo Fighters del concierto, "Times Like These".
"Para los que le conocieron personalmente, saben que nadie más puede hacerles sonreír, o reír o bailar o cantar como él podía, y para los que le admiraban desde lejos, estoy seguro de que todos han sentido lo mismo. Cantar y bailar, y reír y llorar y f****** gritar y hacer algo de ruido f****** para que él pudiera oírnos ahora mismo, porque sabéis que va a ser una larga f****** noche, ¿verdad?", se escucha decir a Grohl-.
Shane honra a su padre
Pero sin duda el momento más emotivo de la noche fue cuando el hijo adolescente de Hawkins, Oliver Shane, de 16 años, tomó su turno y subió al escenario junto a la banda para realizar una conmovedoray brillante interpretación de My Hero.
Supergrass, Rush, el cantante de AC/DC Brian Johnson, Nile Rodgers, Josh Homme y Kesha fueron otros de los músicos que actuaron en el espectáculo, al que también se unió Violet, la hija de Grohl, para cantar Grace, de Jeff Buckley, y, más tarde, Valerie con Mark Ronson.
El emotivo homenaje finalizó con Everlong, canción con la que cierran todos los conciertos de Foo Fighters; pero en esta ocasión solo cantó Dave Grohl, quien solía intercambiar lugar con Taylor Hawkins.