Taste Atlas declara a la guajolota como una de las peores comidas callejeras

Los tamales sin duda son para muchos mexicanos, prácticos y deliciosos, sobre todo en las mañanas cuando las prisas provocan que no se pueda tomar el desayuno.

Relacionado a lo anterior y como muchos saben, este platillo es típico de México, es muy económico y rico, por lo que es la opción y al mismo tiempo la ventaja de quienes necesitan tener algo en el estómago antes de ir a trabajar.

A pesar de eso, recientemente Taste Atlas declaró que el tamal y las guajolotes son una de las peores comidas callejeras.

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Cabe señalar que la empresa que dio a conocer tal resultado es una guía de viaje que se especializa en explorar platillos tradicionales, ingredientes locales, así como restaurantes auténticos de todo el mundo.

Pero no todas las críticas son negativas respecto a la comida mexicana por parte de este medio, ya que en el pasado reconoció a la cochinita pibil como el platillo número 1 de todo el mundo, de igual manera destacando las enmoladas (27), el pozole (58) y el alambre (93).

Taste Atlas también reconoce la cochinita (1), los tacos al carbón (2) y los tacos de carne asada (4) como los mejores platillos de comida callejera del mundo. El mole como la segunda mejor salsa, la torta como el cuarto mejor sándwhich, los chilaquiles como el segundo mejor desayuno, y la barbacoa como la quinta mejor técnica para cocinar.

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A pesar de los halagos anteriores, ha llamado la atención que dicho medio pusiera en la posición número seis de las peores comidas callejeras del mundo al tamal, pues al contrario de eso muchos opinan que es delicioso.

Los argumentos que tiene Taste Atlas para asegurar que es uno de los peores alimentos del mundo es que la torta de tamal (o guajolota) “es una comida callejera popular en México que generalmente se consume para el desayuno y consiste de un bolillo suave relleno con un tamal”.

El texto elabora que “en Oaxaca, el tamal se rellena típicamente con mole negro y pollo desmenuzado”, pero es de asumir que la cocina oaxaqueña se deslinda por completo de esta invención chilanga.

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Taste Atlas añade que se acostumbra comer la torta “cargada de carbohidratos con aún más carbohidratos en forma de atole, una bebida caliente a base de maíz”.