Chloë Grace Moretz y Kate Harrison se casan y sorprenden en la boda por sus peculiares vestidos
La actriz y la modelo sellaron su historia en una ceremonia íntima que apostó por lo esencial: complicidad, moda y pequeños rituales compartidos
Chloë Grace Moretz y Kate Harrison se casan / instagram
Hay amores que no necesitan reflectores para brillar. Chloë Grace Moretz y Kate Harrison lo saben bien: tras casi siete años de caminar juntas lejos del ruido mediático, decidieron dar un paso más y casarse en un ambiente discreto, rodeadas solo de lo que realmente importa.
El escenario no se filtró, tampoco las primeras imágenes, al menos de momento, pero sí se conocen las pinceladas que hacen imaginar una celebración hecha a la medida de ambas: vestidos pensados como declaraciones de estilo y actividades que se alejaron de lo convencional para dar paso a lo que más disfrutan compartir.
Un azul inesperado y un blanco clásico
La actriz, que creció frente a la cámara en cintas como Kick-Ass o Carrie, viajó a París para trabajar de la mano con Nicolas Ghesquière en Louis Vuitton. De esa colaboración surgió un vestido azul vaporoso, un guiño a la vieja Hollywood que dejaba ver tatuajes y piel con un aire entre onírico y rebelde.
Kate, en contraste, eligió la pureza del blanco: bordados florales para el sí definitivo y un conjunto de pantalón con túnica translúcida para la fiesta posterior, cómodo y elegante al mismo tiempo. Ambas mantuvieron la tradición de no verse hasta el instante crucial; ambas coincidieron después en que ese primer vistazo lo hizo todo real.
Mucho más que un banquete
La boda no se limitó a los brindis y las flores. Hubo caballos, cartas de póker y hasta momentos de pesca. Detalles que, lejos de ser anecdóticos, hablan de una pareja que ha hecho de lo cotidiano su propia celebración. Entre baile y complicidad, demostraron que lo fundamental no está en la espectacularidad, sino en elegir cada día a la misma persona.
Dos trayectorias que se cruzan
Moretz, hoy con 28 años, ha pasado de niña prodigio a actriz con un repertorio sólido, capaz de saltar entre la acción, el drama y lo independiente. Harrison, con 34, es modelo y fotógrafa, con campañas para J. Crew o Topshop en su currículum y una mirada creativa que se reflejó en cada gesto del enlace.
La suya no fue una boda para la portada, pero sí un retrato honesto de lo que son: dos mujeres que transformaron su complicidad en un acto íntimo, sin guion ni artificio, donde moda y amor caminaron de la mano.
Viviana Hernández Bran
Licenciada en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón, UNAM. Creadora de contenido escrito y digital...
