Socavón en Puebla sigue creciendo y horroriza a pobladores
Al principio se formó un agujero de 10 metros de diámetro, ahora alcanzó los 100 metros y nadie sabe a dónde va la tierra que se hunde
Recientemente, un fenómeno natural ha ocurrido en Puebla, se trata de un socavón que al principio medía 10 metros de diámetro y que para sorpresa de muchos continuó creciendo hasta alcanzar los 100 metros.
El hecho ocurrió el pasado sábado en los terrenos de cultivo de Santa María Zacatepec, justo en donde se encuentra la comunidad del municipio poblano de Juan C. Bonilla.
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De acuerdo con algunos expertos en el tema, la formación del socavón no tiene explicación, por lo que lo único que se ha podido hacer es movilizar al personal de Protección Civil Nacional y del Centro Nacional de prevención de Desastres para cercar el sitio y estudiar la causa que originó este fenómeno.
El problema que a muchos preocupa hasta ahorita, es que conforme pasan las horas sigue aumentando de tamaño, al grado de que la casa de la familia Sánchez Xalamihua está al borde de ser tragada por la tierra.
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“Sabemos que son estudios geotécnicos y geofísicos, inicialmente, pero no nos han dado los detalles, se está determinando porque para implementar una estrategia de atención, primero necesitamos saber cuál es el origen, por ello se deben hacer estudios”, dijo Eduardo Vargas, director operativo de Protección Civil estatal.
Al no tener una explicación científica de lo sucedido, los campesinos que se han encargado de labrar esa tierra desde hace más de 60 años señalan que el lugar siempre fue un terreno de siembra, y que desde hace más de cinco décadas existía un jagüey, también conocido como sistema de acuacultura, que aunque estaba a una distancia considerable de donde se formó el socavón, pudo ser una de las razones que provocaran dicho fenómeno.
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“Todas estas tierras nosotros las trabajábamos, mi padre tuvo tractores agrícolas, sabemos cómo están las tierras, pero jamás pensamos qué había abajo, hasta nosotros peligrábamos en ese tiempo por andar en tractores, y nunca pensábamos lo que iba a pasar ahorita”, aseguró el campesino Roberto Ventura.
Lo que sin duda preocupa a muchos, es que a poco más de 72 horas de registrarse el primero hoyo de 10 centímetros de diámetro, la tierra volvió a hundirse hasta alcanzar los 100 metros.
Por el momento, el riesgo de más hundimientos y derrumbes es latente, por lo que este martes llegaron a la zona elementos de la Guardia Nacional y policías estatales para impedir el paso a curiosos, acordonando el área.
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