Voice of Cards: The Forsaken Maiden, una aventura RPG de ritmo pausado y excelente arte.
Una gran opción de RPG para los jugadores que buscan una experiencia más casual y relajada
La serie Voice of Cards de Square Enix presenta una propuesta única e interesante dentro del género de las aventuras RPG: estos son juegos donde absolutamente todos los elementos son representados por cartas de una baraja. Esto genera un interesante estilo visual donde escenarios, personajes y situaciones son representadas por naipes que contienen arte altamente estilizado. Voice of Cards: The Forsaken Maiden es la más reciente entrega de esta saga, donde la historia nos transporta a una isla remota que se encuentra en un peligro inminente. La jugabilidad es entretenida, gracias a un dinámico sistema de batallas por cartas; pero el ritmo de la narrativa puede ser demasiado lento para algunos jugadores.
Una isla en aprietos
La historia se da en una fantástica cadena de islas de una tierra lejana. Estos lugares son protegidos por damiselas místicas que utilizan su magia para alejar a estos lugares del peligro. Nuestro protagonista se encuentra justo en una isla a la que le falta su damisela. Al mismo tiempo el se encuentra con una chica amnésica que parece estar relacionada con estas guardianas. De este modo nuestro héroe intentará salvar a la isla recuperando la magia de las damiselas, pero ciertas figuras del mismo poblado se oponen a su misión. ¿Por qué alguien querría la destrucción de la isla y a dónde se ha ido su damisela?
Un elemento original de esta historia es que toda es narrada por una misma persona, como si se tratase de alguien dirigiendo un juego de mesa. De hecho, como transcurre la historia, es que este personaje va revelando y moviendo las cartas que nos cuentan la historia y nos representan a los personajes. Esto genera una narrativa muy diferente a lo que estamos acostumbrados. En vez de ver personajes a los cuales controlamos, estamos viendo su representación como si fuera un juego de tablero en la vida real. El ritmo es más pausado que un videojuego RPG típico, lo cual nos lleva una experiencia más relajada y casual. Sin embargo, este cambio podría sentirse algo tedioso para quiénes son más impacientes y buscan que sus juegos comiencen la acción lo antes posible.
Batallas y diversión
A diferencia de la forma en la que cuenta la historia, Voice of Cards tiene un sistema de batalla entretenido y que requiere de mucha estrategia. Los encuentros contra los enemigos son por turnos y tus acciones consumen cartas de una baraja o requieren de piedras que generas a través de ciertos naipes especiales. Las peleas son dinámicas y requieren de toda tu atención para encontrar las cartas correctas y utilizarlas en el orden adecuado que te otorgue la victoria. Conforme los personajes suben de nivel a quieren nuevas habilidades y cartas, las cuales pueden combinarse para obtener resultados realmente devastadores. Es sumamente entretenido pensar en estrategias de combinaciones de cartas, para alcanzar ese combo perfecto.
Pinceladas de grandeza
A pesar de que en el aspecto técnico el juego no es sobresaliente, su dirección de arte es realmente única y cautivante. Cada uno de los personajes está dibujado con enorme detalle y, a pesar de más ser imágenes estáticas en 2D, cada ilustracion les confiere personalidad y estilo. En el apartado del audio tenemos un gran trabajo de doblaje por parte del narrador, quién trata de hacer la descripción de todo lo que sucede algo entretenido y que capte tu atención. Pero, como lo mencionamos anteriormente, puede ser que más de un jugador quiera pisar el acelerador para entrar en acción.
Conclusión
Voice of Cards: The Forsaken Maiden es una experiencia única dentro del género del RPG, que está totalmente enfocada a los jugadores que buscan un ritmo más pausado y casual. Si tienes la paciencia para dejar que el juego te cautive, su sistema de batallas y la historia te recompensarán ampliamente.
Por Rolando Vera
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