Madden NFL 23 ¿un cambio de nueva generación en el emparrillado?
Una actualización centrada en los controles y la simplificación de las jugadas
Como cada año, EA Sports ha lanzado el nuevo titulo de su simulador de fútbol americano basado en los equipos de la NFL, la segunda entrega que reciben las consolas de la nueva generación, ¿Madden NFL 23 ofrece cambios sustanciales en comparación con la entrega del año pasado? Aquí te contamos si vale la pena o no.
¿Un touchdown o solo es otra pérdida de balón?
Esta versión se lanzó para PlayStation 4 y 5, Xbox One y Series X / S y PC, pero la versión de este año tiene un noble gesto en menús y diseños en honor al fallecido jugador y entrenador John Madden, leyenda de la NFL del que se basó EA Sports para nombrar la saga y quien lamentablemente murió en diciembre del 2021, por lo que apenas empezar el juego nos encontraremos con un emotivo video que finaliza en “Thanks Coach”.
Pero, volviendo al apartado técnico del juego, los desarrolladores indican que, al igual que el año pasado, la edición de consolas de nueva generación no solo ofrecen la jugabilidad de siempre y los modos de juego tradicionales, sino que solo para PlayStation 5 y Xbox Series X / S cuenta con el añadido “Field Sense”.
En general, se trata de una función que añade aspectos del gameplay como lo señalamos en nuestro previo, haciéndolo más preciso y con dinámicas nuevas, que aunque no son significativas, mejoran la experiencia.
Esto se traduce en nuevas formas de enviar los pases desde el quarterback, donde influye notablemente la tensión de los sticks, el tiempo de presión del botón de lanzamiento y el timing al momento de ejecutarlo. Que, aunque te ofrece una mejor precisión y control en tus jugadas, te tomará un tiempo acostumbrarte.
También añaden pequeñas “batallas” de tackling entre los corredores y los defensores, donde debes presionar rápidamente el botón X o A dependiendo de la consola, para intentar ganar el duelo físico. Este punto fue el que más nos gustó del añadido Field Sense, ya le añade un poco más de emoción no solo a nivel gameplay, sino a nivel desarrollo del partido.
Otro punto interesante es la inteligencia artificial de Next Gen Stats, es decir, las características reales de cada jugador con base en su rendimiento en los encuentros de cada semana, lo que brinda una experiencia de realismo aún mayor.
Un balón suelto para nuevas consolas
El gameplay del juego, así como los controles y modos de juego son, en resumen, los mismos del año pasado, y parece más una actualización del Madden 22 pero con el añadido de Field Sense y nuevas plantillas.
Entonces ¿Qué puedes esperar de este título? Los controles se sienten adecuados tanto para los novatos de Madden como para los veteranos, ya que seguiremos contando con jugabilidad Arcade (pases fáciles y jugadas des complicadas ideal para quienes no comprenden el juego), modo Simulación (que toma en cuenta las estadísticas reales de cada jugador y el realismo es mayor) y por último la opción Pro (cuya función es hacerlo lo más real posible incluyendo la fuerza y movimiento de los sticks del control para modificar velocidad, trayectoria y fuerza de cada acción).
Con la posibilidad de poder seleccionar cualquiera de estos antes de empezar cada partido, y lo mejor es que las configuraciones son independientes de la dificultad de la computadora, por lo que, si solo quieres un juego arcade para pasarla bien o entrar en un partido real, puedes elegir sin problemas.
Para la funcionalidad del DualSense en el PlayStation 5, no tenemos novedades respecto a Madden NFL 22, pero sigue siendo un añadido interesante para jugar.
Utiliza la vibración HD en cada momento, por lo que sentirás cuando el quarterback reciba el balón con un pequeño golpe, o las pisadas de tu corredor en el pasto dando ligeros movimientos. Mientras que, para el altavoz del mando, escucharás hablar al quarterback y un contador de tiempo que pitará cuando debas deshacerte del balón antes de que acabe tu turno. Mientras que los gatillos adaptativos cambian cuando corres y lanzas el ovoide.
¡A mover las cadenas!
Madden NFL 23 cuenta con distintas opciones para meterte al emparrillado y comenzar a jugar, todo dependiendo de tus gustos.
El juego cuenta con clásicos partidos de exhibición, el modo Franchise que se resume como temporadas con un equipo donde administras de todo, el infaltable Ultimate Team, un modo más “callejero” llamado The Yard y la campaña conocida como Face of the Franchise.
El modo más atractivo que tenemos es el Face of the Franchise, que consiste en crear un avatar que vivirá la experiencia de ascender en la NFL. Un punto a resaltar es que, a diferencia del año pasado, ahora se siente mas ágil y con menús más concretos, concentrándose más en la jugabilidad y el entretenimiento.
Visualmente atractivo
El apartado visual es adecuado, y cumple con la función de ambientar correctamente en los estadios de cada equipo. También resalta el escaneo de los jugadores, sin embargo, en ocasiones se sienten uniformes, gestos y algunas texturas como el cabello, con un efecto “acartonado” esto a pesar de probarlo en un PlayStation 5 y en una televisión 4K, por lo que la experiencia es justa para ser un juego de nueva generación.
Lo destacable son los tiempos de carga casi nulos, pues a pesar de que cambiábamos frecuentemente de modos de juego o terminaba un partido y regresábamos al menú, las pantallas de carga no tardaban más de un minuto, por lo que nos gustó la manera en la que aprovechan este punto.
Como es característico de Madden, un punto negativo es su apartado del idioma, ya que no cuenta con ninguna otra opción más que el inglés tanto en menús como narraciones, esto, aunque cambies el idioma de tu consola, lo que causa una oportunidad importante para aquellos que no estén familiarizados con el idioma.
Conclusión
Madden NFL 23 ofrece características destacadas como nuevas funciones gameplay que afectan directamente en el marcador, y los tiempos de carga se aprovechan bien en consolas de nueva generación. Sin embargo, fácilmente se puede interpretar como una actualización de Madden 22 pero con cambios de plantillas.
Por Marcos Rabía
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